«En vez de recomendarle limpieza a los pobres, hemos de aconsejarle lo contrario, haremos más estrechas las calles, meteremos más gente en las casas y trataremos de provocar la reaparición de alguna epidemia», Thomas Malthus??
Montevideo, 10 de enero de 2010 ?
Si bien parecería esta formula maltusiana que el imperio esta empleando en Haití??En realidad su aplicación podría estar siendo más amplia..
Recorriendo la Internet, nos encontramos con este interesantísimo análisis de Immanuel Wallerstein publicado en la Jornada de México1 y reproducido por el comprometido portal rebelión.org2??En el mismo hace un recorrido por las situaciones de los grandes conglomerados económicos del mundo (Estados Unidos, Unión Europeo, países emergentes), fundamentando el porque el conocido científico social de origen estadounidense, piensa que estamos lejos de revertir la crisis, sino al contrario que esta posiblemente se profundizará??
Recomiendo vivamente leer el artículo, que presenta situaciones aparentemente locales, que son trasladables a buena parte de las economías del norte geopolítico, pero??existe algunos movimientos, fundamentalmente venidos desde China, que parecen apuntar a un reperfilamiento del sistema, que al menos discipline el comercio exterior (con una fuerte inversión en sectores estratégicos y una apuesta a la manejabilidad de la deuda externa europea) de tal manera, que este pueda al menos salvaguardar los movimientos macroeconómicos más negativos??
Pero obviamente, más allá de este tipo de intentos y del maquillaje de las cifras bastante generalizadas que hacen los gobiernos, así como de la utilización de magnitudes y conceptos económicos para fines publicitarios??que intentan demostrar que algo de recuperación ha existido?? la economía en crisis, no parece mostrar una tendencia a recomponerse, al menos dentro de los equilibrios neoliberales??que sea han impuesto desde la voluntad del gran capitalismo y acatado por el G20 y el consenso de Londres, equilibrios que coincidimos con Wallerstein agravan la crisis??
Pero hay dos vertientes de lo escrito por el sociólogo Immanuel Wallerstein, que resultan muy inquietantes, La primera después de un coherente análisis, que a nuestro entender demuestra que los principales argumentos usados por quienes habla de un atisbo de recuperación son falaces, nos dice?? ?Finalmente, y no es menor, hay aumentos marcados en los precios de la energía, los alimentos y el agua. Esto es el resultado de la combinación de un crecimiento en la población mundial y el aumento en los porcentajes de gente que exige contar con ellos. Esto implica una lucha en pos de estos bienes básicos, una lucha que puede tornarse mortal. Hay dos posibles resultados. Uno es que gran cantidad de gente reduzca el nivel de su demanda ?lo que es de lo más improbable. Otro es que lo mortal de la lucha termine reduciendo la población mundial y por lo tanto haya menos escasez ?una solución malthusiana de lo más desagradable.??1
En la lectura de lo planteado por Wallerstein, se entiende que las causas principales al menos del aumento de precios de la energía, los alimentos y el agua??son una combinación del crecimiento de la población mundial y el aumento en los porcentajes de gente que exige contar con ellos??Pero veamos??la población aumenta constantemente y sin embargo, los ajustes han elevado notoriamente la cantidad de personas que demanda en menor medida estos tres elementos (energía, alimentos y agua), por una baja de su poder adquisitivo?? Podemos decir que el consumo de la población debido a la crisis económica, parece haber bajado los niveles de consumo en todas las áreas, al encarecimiento de la energía, se suma su baja de poder adquisitivo (agravado en bastos sectores por el desempleo) esto hace que un asalariado tienda a gastar menos, especialmente porque en casi todo el mundo, el poder adquisitivo real de los salarios tiende a bajar notoriamente como ya hemos dicho??Entonces, adonde va la creciente cantidad de estos tres elementos vitales, cuya producción se aumenta notoriamente año a año??
Otro aspecto, es quienes están produciendo en gran escala en el mundo, esos tres elementos, algunas multinacionales que ha conformando realmente un sistema oligopólico, que aumento su área de explotación incluso a acuíferos no explotados, o a fuentes de petróleo y maga represas hidroeléctricas y ellas marcan el precio, que obviamente es asequible en la escala de consumo mayor, a sectores cada día menores de la población mundial, de hecho son casi 1000 millones de seres humanos que no reciben de esos tres elementos básicos, la cantidad necesaria, para poder sobrevivir, lo que mantiene un alto nivel de mortandad en algunas zonas del planetas con problemas conexos con la falta de energía, agua y alimentos(y debemos por su especial incidencia en algunas zonas del globo, de los medicamentos )??Aunque las cosechas mundiales han sido muy buenas, tanto que podrían alimentar a todo el planeta sin problema y sobraría??y ni que hablar con la actitud cuasi homicida de algunos laboratorios con África??imponiéndonos el modelo capitalista y depredador de las patentes de invención??
Pero el tema se vuelve aún más interesante?? ?cuales son los dos resultados posibles?? de esta situación, uno es el Malthusiano??que una posible guerra, se deshaga de la población digamos ?sobrante???? Wallerstein usa para definir el termino guerra??la palabra lucha??que no restringe la cuestión a guerras localizadas, sino a otro tipo de acciones por ejemplo, a epidemias que maten a la población sobrante en formas localizadas, por supuesto sin capacidad de obtener los medicamentos adecuados y negándoles el acceso a los mismo ??
Obviamente parece más fácil, bajar el índice de la población mediante esterilizaciones masivas y reducirla mediante por ejemplo 163 conflictos en lugares donde se conservan reservas o posibles reservas de esos elementos, para esto alguna potencia tienen mucha gente armada, incluso hasta con conflictos localizados se podría digamos elegir quirúrgicamente a que sectores y geografías de la humanidad llevamos la guerra, para atenuar el consumo mediante la disminución poblacional??. Este más plausible resultado, según el articulo tiene a nuestro entender un problema y es que matar a los pobres(como preconizaba Malthus), si no se tiene una exacta medida de cuantos matar?? se pierde la mano de obra barata que hace posible que los recursos estén disponible, con su trabajo, para el consumo??Por lo que pacería en principio que el neomaltucionaismo, deberá moderar sus ansias de guerras localizadas y epidemias exportadas??y esperar a conseguir una forma de matar y esterilizar a un numero exacto de personas, de tal manera que libere el consumo necesario para que las elites mantengan su nivel, sin disminuir excesivamente la población, y esto afecte la mano de obra cautiva, (pues con su trabajo, genera los producto necesarios para consumo humano a bajo precio)??(El uso de una ironía tan negra, se me ocurrió mirando los focos del conflicto del planeta y que organizaciones es en buena medida la causa)
La otra que el artículo casi descarta es la baja del consumo??
En primer lugar, la modestísima opinión de este servidor al que el simple nombre de Thomas Malthus le asquea, es que si se ?racionaliza?? el consumo de esos tres elementos, a la medida de la necesidad humana??no será necesario recurrir a las soluciones Maltusianas??
Si determinados sectores privilegiados y actividades de algunos gobiernos que tienen un enorme gasto de combustible por ejemplo con fines bélicos, dejarán de consumirlo, si las poblaciones pudieran tener una dieta balanceada, en cantidad y calidad, evitando en algunas zonas del planeta las enfermedades por la sobrealimentación, de comida fundamentalmente la denominada chatarra??así como de sobrecarga de consumo de energía y agua??podría vehiculizarse una disminución del consumo de estos tres elementos, para ser trasladados a sectores de la humanidad que no acceden al mínimo necesario??
Si los sistemas de producción de productos alimenticios, toman las técnicas ancestrales del hombre que las culturas primigenias aprendieron, en relación empática con la tierra, evitando la sobreexplotación, se evitaría así el agostamiento del planeta, por otro lado la posible multiplicación de las huertas orgánicas y de las semillas criollas defendiendo la biodiversidad y prohibiendo las onerosas producciones de alimentos transgénicos??y la especulación de las multinacionales??así como impulsar las técnicas alternativas de producción de energía y finalmente, el reencauzamiento circular del ciclo hidrológico, con la potabilización de agua del marina y la reutilización de aguas ya utilizadas??pueden abrirnos otros horizontes??
La segunda inquietante vertiente, es la obvia de todo el análisis, no sólo no hay solución dentro del sistema, sino que el sistema ha llegado a su agotamiento y que no hay recuperación porque la proporción entre papeles y bienes circulantes, esta casi igualada, es decir hay tantos bonos, papeles, monedas, etc.??circulantes que ya los bienes circulantes no alcanzan a cubrirlos y en realidad los ajustes y la mayoría de los caminos ensayados, no sirven de nada y los teóricos del sistema, sus instituciones y sus dinámicas, dan vuelta tratando de morderse la cola, pero no logran estabilizar ?? nada??La única salida posible y real, es una racionalización de los consumo, llevados a cubrir las necesidades básicas, de energía, agua y alimentación, un volver a las técnicas campesinas, empujando la intuición de la soberanía alimentaria y eliminar los oligopolios multinacionales corporativos y sus especulación?? Y esto nos guste o no, es salirse del sistema capitalista neoliberal??
1 http://www.jornada.unam.mx/2011/01/08/index.php?section=opinion&article=018a1mun
http://www.crisisgroup.org/en/publication-type/commentary/next-years-wars.aspx
(Información recibida de la Red Mundial de Comunidades Eclesiales de Base)