Los matrimonios civiles superaron por primera vez en 2007 a los religiosos en las provincias de Valencia y Castellón. Por otro lado, el 21% de los nacimientos registrados en la Comunitat son de padre o madre extranjeros. El número de hijos por mujer alcanza su valor más alto desde 1990 al situarse en 1,39.
El número de matrimonios civiles en 2007 superó por primera vez a los religiosos en las provincias de Valencia y Castellón. Así lo recoge la encuesta sobre el Movimiento Natural de la Población hecha pública ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
De las 12.220 bodas registradas en la provincia de Valencia durante 2007, 6.162 se celebraron por la vía civil (el 50,4%), 6.002 (el 49,1%) fueron según el rito de la Iglesia Católica, mientras que el resto (56) se realizaron atendiendo a las costumbres de otras religiones.
El incremento del número de ceremonias civiles se viene detectando desde 2000. Ese año se celebraron 3.320, el 25% del total. En 2003, la cifra alcanzaba ya las 4.994 (el 35%). El año pasado los matrimonios celebrados en Ayuntamientos y juzgados de la Comunitat fueron 5.604, el 44% del total celebrado.
Castellón ha mantenido un comportamiento similar al de Valencia. En 2000 hubo 585 bodas civiles (20%). El año pasado se registraron 1.368 ceremonias civiles (51) frente a 1.345 por el rito católico y otras dos según las costumbres de otras religiones.
Paralelamente, durante el mismo periodo se ha detectado un descenso de los matrimonios en términos globales. En 2000 se registraron en la Comunitat 23.647 bodas frente a las 22.451 del año pasado, lo que supone un descenso del 7% en siete años.
La encuesta recoge que el 21% de los nacimientos registrados en 2007 en la Comunitat Valenciana fueron de padre o madre extranjera. Es decir, 11.825 de los 54.552 nacimientos inscritos el pasado sño en la Comunitat Valenciana. Esta cifra se sitúa dos puntos porcentuales por encima de la media nacional (19%) y responde a que la autonomía es una de las principales receptoras de inmigrantes de toda España.
Los datos publicados ayer por el INE confirman la importancia que ha cobrado la población procedente de otros países en los movimientos demográficos que han tenido lugar en España durante los últimos años. El incremento del número de nacimientos es paralelo a la llegada de inmigrantes a España.
En el año 2000, el 6,4% (2.647 de 40.735) de los nacidos en la Comunitat fueron de madre extranjera. Según los últimos datos, los niños con padres procedentes de otro país se han multiplicado en siete años por 4,5.
En 2001, los hijos de madres extranjeras suponían ya el 10% de los nacidos en la Comunitat Valenciana. En 2005, los nacidos de padres de otras nacionalidades eran ya 10.221, el 20% del total.
La situación no se da sólo en la Comunitat Valenciana. Las cifras, según los datos hechos públicos ayer por el INE, son una constante en todo el territorio nacional.