…quien quiera ser el primero que se haga esclavo de todos. Pues este Hombre no vino a ser servido, sino a servir y a dar su vida como rescate por todos (Mc. 10,44-45)
Montevideo, 13 de abril de 2012 –
En el Semanario Brecha de hoy (viernes 13 de abril de 2012- año 27 Nº 1377), me encuentro en la tapa tomada desde un Angulo muy original del monumento de tres cruces ( la cruz y una estatua de Juan Pablo II que celebra su visita al Uruguay de Juan Pablo II) y un titulo que llamo a mi asombro “Las llave del reino”…
Repliegue progresista y poder conservador en la Iglesia Católica…un artículo de Mariana Contreras (que si no me equivoco es una carismática licenciada de la comunicación) y Ricardo Scagliola, un inquieto licenciado de la comunicación, periodista de la embletica Motivos de Puteo)…Hacen un muy equilibrado análisis de la institucionalidad de la Iglesia católica en Uruguay…incluso citando algún querido hermano el entrañable Presbítero Pablo Bonavía…que no habla más bien de la Iglesia de la base…
Leí algunas partes con asombro, otras en discrepancias, algunas muy sabrosas y compartibles, lo cierto es que necesariamente hablaba de la Iglesia…y para mi la Iglesia es un lugar de pertenencia, más allá de mis oscuridades y miserias y las de mis hermanos…Esto motivo, un rumiar lentamente el artículo y desato, necesariamente la reflexión, no como teólogo, ni siquiera como un ministro de la Iglesia, sino como una persona, ante su fe…como alguien que pone arriba de la mesa, sus convicciones más profundas, sobre su relación con Dios y los hermanos…
Antes de compartir esta reflexión debo ser justo, en esta digamos valoración que se hace de algunos temas en el artículo no soy neutral, me va mucho, porque hay cosas que se han incorporado de forma sustantiva a mi sentir (una de ellas es la presencia cercana del Resucitado a cada uno de todos los seres humanos), que junto con la realidad motivan mi pensar y mi obrar…Yo intento vivir mi Fe…en la clave praxica que nos ha ido trasmitiendo la teología de la liberación, creo con todo lo que soy, es decir que todo mi ser cree, que una parte muy importante del mensaje-revelación-autodonación a los hombres de Jesús de Nazareth, fue que sus discípulos ( o los que tratamos de serlo) seamos pobres y por lo tanto, para nosotros el estar junto a los postergados, a los explotados, a los perseguidos, a los perdedores y desposeídos de nuestra realidad, resumiendo a lo pobres, además de una solidaridad natural, por asumir ser nuestra pobreza, hay un mandato de fe, que hace a la economía de la salvación…y que a partir del trabajo común de los de abajo y de nuestra lucha, en Él, hacemos crecer su Reino…
Habiendo aclarado este punto, diré que no encontré en el artículo algo que fuera mentira, uno podría relativizar alguna cuota de especulación, sin embargo aún en eso coincido con el abordaje del artículo, sin embargo me voy a permitir discrepar en el enfoque epistemológico…Hay una confusión sustancial, un error en mi modesta opinión que atraviesa el artículo…Y es confundir a la Iglesia, es decir a la Eklesia…la Asamblea con las Jerarquías y me temo que yo creo en lo que decía el concilio Vaticano II y especialmente en lo consignado el capitulo II de la Lumen Gentium…que deja bien claro que la Iglesia es el Pueblo de Dios…
Podría avanzar rápidamente a reflexionar en cuales se sitúan sus limites, sus fronteras, que a mis ojos aparece a veces muy difusa…pero creo que esa es una verdad ya rebelada, pero aún no del todo debelada del todo…sobre la que debemos seguir abriendo el corazón y la mente…
Pero si con respeto a eso me parece que hay algunas cosas del artículo que al menos para nosotros y basados en el fundamento de la Iglesia no son sólo las Jerarquías y que el laicado al menos, es tan Iglesia como la Jerarquía, se nos vuelve controversiales…
Como preámbulo a plantear los conceptos concretos y desarrollar la argumentación de por que nuestra discrepancia, vamos a partir de una coincidencia con el articulo, pero matizando lo allí expresado… El artículo dice… “La llegada de Juan Pablo II al sillón de San Pedro en 1978, de la mano de un constante ascenso del Opus Dei, comenzó a debilitar expresiones como la de la teología de la liberación nacidas en América Latina tras el Concilio Vaticano II y la Conferencia de Medellín celebrada en 1968”…*
En primer lugar, vamos a partir de un abordaje diferente al del artículo, la Iglesia, es un Pueblo y lo que determinados sectores de un pueblo haga, no hace a la totalidad de la Iglesia y esta, esta presente y actuante en el Espíritu, incluso más allá de los limites de su estructura institucional…
Entonces podemos decir que con Juan Pablo II, se reinterpreto, en forma… a mi entender arbitraria y que no se compadecía de lo planteado por la mayoría de los padres conciliares y plasmado en la letra del Concilio…operándose una trentinisación (vuelta a Trento) de buena parte de la praxis institucional eclesial…pero no comparto que la Teología de la Liberación comenzará a debilitarse … Gente como yo que no es teólogo tiene la oportunidad de decir lo que ve y como lo interpreta, pero lo que vemos es que Roma margino de la institucionalidad a la una parte importante de la Iglesia, que vive de una forma la fe, que al sistematizarla, surge la Teología de la Liberación, sobre la que desarrollo una vigilancia casi policial en materia de doctrina y teología…y por lo tanto de praxis…esto hizo que la teología de la liberación muchas veces cruzará fronteras, para instalarse en otras tradiciones religiosas, o en el medio del mundo…
Siento una fuerte identificación de este proceso, con el proceso del grupo de los Helenistas, perseguidos por los Judíos, después de asesinar a Esteban y cuya diáspora extendió, la enseñanza y el camino de Jesús de Nazareth a toda el Asía menor y la fundación de la Iglesia de Antioquia…dentro de dinámicas y procesos que establecieron un nuevo paradigma eclesial…
Hoy los teólogos desautorizados por las Jerarquías, convocan a los laicos en las bibliotecas, en muchas partes del mundo y no sólo a los laicos, hoy una importante cantidad de párrocos austriacos, que seguramente son la voz de muchos presbíteros silenciados que plantean cara a la institucionalidad, la necesidad de reformar… es decir de volver sobre los pasos del Nazareno y seguir su camino y esto empieza por desterrar el pensamiento único impuesto por medios coercitivos, muy sutiles, pero tan efectivos, como una sentencia judicial…
En resumen la teología de la liberación no tiene mucha prensa, pero sigue viva, en el corazón del pueblo y de la historia y en muchas comunidades que dentro o fuera de las fronteras de la institución eclesial intentan de vivir de una manera tal, que lo que se dice y se escribe pueda formar parte de una praxis, no de una teoría y que descubre el mundo, la realidad como el ámbito donde se produce el hecho, la acción la vida, que da lugar al hecho teológico y que es lugar privilegiado para formar el Reino estar en medio del pueblo y ser del pueblo especialmente los más postergados y desposeídos, los más explotados y maltratados por el sistema, porque descubrimos que como decía Cacho Dios se sienta a su mesa y Jesús esta a su lado, así descubrimos que nosotros mismos somos postergados, y ya no hay un ellos y un nosotros, sino solamente un nosotros y la necesidad de luchar por mundo más justo, humano y fraterno…y se incorpora a nuestra Fe, el sentir-creer-pensar-hacer, que Dios en medio de nosotros, suda con nosotros en nuestros trabajos y en nuestra luchas, en la construcción de otra mundo que es posible y en donde el Reine…
Avanzado en esta nuestra reflexión se dice también en el artículo “Una vez al frente del Arzobispado de Montevideo, Parteli denunció a la dictadura pero las diferencias dentro de la Iglesia Católica impidieron una condena explicita al golpe. En 1972 un enfrentamiento de los obispos con Bordaberry –todavía Presidente Constitucional (véase Brecha 13-XI-09) rompió con la tradicional lejanía de las autoridades eclesiásticas respecto a la política. Cuando el golpe era inminente, la CEU publico un documento en el que se condenaba la tortura.
Al día siguiente de su aparición, Bordaberry publicó una solicitada en donde defendía “los interrogatorios rigurosos” y acusaba a los obispos de mentirosos. Al poco tiempo el Vaticano llamaría al orden a los suyos y ya no se volvería hablar de “torturas”. Era el inicio de una etapa de silencio en torno a los crímenes de la dictadura.”
Una vez más, lo afirmado tiene que ver con las Jerarquías, que era a quienes el Vaticano podía silenciar Muchos silencios especialmente en la gran prensa se debía al simple hecho de que o sus dueños eran partidarios del golpe o los que hablaban demasiados, eran rigurosa y normalmente salvajemente silenciados, o los periodistas capaces de gritar la verdad, o estaban en el exilio, o estaban siendo torturados o estaban muertos…
También estaban aquellos que fueron clausurados por tiempo indeterminado… Pero la Iglesia, de ese tiempo, saco del país a muchos requeridos por la dictadura, desde los grupos y comunidades, en forma muchas veces espontánea y natural se apoyo como se podía a muchos presos políticos y son también la Iglesia, muchos que pasaron a la clandestinidad y eran creyentes cristianos, son también la Iglesia, muchos cristianos torturados y asesinados, son la Iglesia quienes se movilizaban militando dentro de sectores o corrientes gremiales y políticas y desde la sombras, fuimos apostando por la organización social…
En eso hubo mucho laico…también hubo curas y algún Obispo…que hablaban con sus hechos contra la oscuridad y la brutalidad de los dictadores…y luchaba contra ellos…
Lo otro es que los sectores progresistas estamos (este un insignificante servidor, caminando con gigantes luchadores de la Luz) seguros que es la conciencia y la mentalidad de las personas y del pueblo donde se gestan los cambios, no son las declaraciones rimbombantes, ni el gastar energía con una Institucionalidad, que no esta dispuesta a escuchar…Es en la calle, en la frontera, en los espacios en donde la voz de la institucionalidad que en no llega, porque no es creíble general a los oídos de la gente en el mundo de hoy (eso no implica que no haya obispos capaces de escuchar e incluso jugarse por la verdad), en donde el testimonio y la vivencia cotidiana se vuelve relevantes, el gesto de una comunidad de solidaridad con los más postergados, será siempre un gesto que haga presente a Jesús Resucitado…en medio del MUNDO…
Estimamos muy modestamente, que la pregunta que deberíamos hacernos debería ser, ¿En donde y como creen ustedes que se es más fiel a Jesús… En la sede de Moisés o entre los que más sufren de nuestra sociedad, en donde la carne viva duele (aprendiendo a sufrir y luchar con ellos)? Cfr Mt. 23,2…
* Semanario Brecha de hoy (viernes 13 de abril de 2012- año 27 Nº 1377)
(Información recibida de la Red Mundial de Comunidades Eclesiales de Base)