El Gobierno atado de pies y manos
La ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera, ha insistido hoy en que su departamento garantizará los derechos laborales de los profesores de religión, aunque, quien reconoce la «idoneidad» de estos docentes es la Iglesia católica.
Así lo explicó hoy la ministra, a raíz de la sentencia del Tribunal Constitucional que avala la capacidad de las autoridades eclesiásticas para otorgar la idoneidad como requisito necesario para impartir la asignatura de Religión, durante la presentación del Libro Blanco del Diseño para Todos en la Universidad, que tuvo lugar hoy en Madrid.
«Los profesores de religión son propuestos por la Iglesia católica, que es quien reconoce su idoneidad. Desde las administraciones educativas tenemos que respetar las normas existentes y los acuerdos con la Santa Sede, además de garantizar a esos profesores sus derechos laborales», concluyó la ministra.
El Ministerio que dirige Mercedes Cabrera ha tenido que reconocer que los acuerdos con la Santa Sede tienen al Ejecutivo central atado de pies y manos para cambiar la situación laboral de los profesores de religión católica. La opción que tiene el Gobierno es aplicar el Estatuto de los Trabajadores, pero nada más.