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La utilidad de la OTAN y su expansión para favorecer la hegemonía estadounidense es una parte inicial del actual conflicto bélico.
La OTAN es uno de los muchos esqueletos obsoletos de la Guerra Fría que ni siquiera debería seguir existiendo en el siglo XXI.En términos lógicos y racionales, esta alianza, que es un brazo militar estadounidense en el Atlántico Norte, debería haberse extinguido en el mismo momento en que desapareció el Pacto de Varsovia, en febrero de 1991.
Sin embargo, la OTAN solo sigue existiendo porque es instrumental y útil para EE.UU. A través de esta Organización intercontinental, EE. UU. realiza sus intereses estratégicos, aumenta su influencia y dominio territorial en Europa del Este, amenaza la seguridad y defensa de Rusia y establece un contrapunto geopolítico a China.
¿No parece curioso que la OTAN, que está formada por Canadá y EE . UU . [1] , haya avanzado e incorporado prácticamente todo el territorio europeo, con excepciones como Bielorrusia, Rusia y Ucrania? Si el objetivo de la OTAN es expandir sus dominios tanto como sea posible sin incluir a Rusia, significa que uno de los propósitos de la OTAN es precisamente oponerse a Rusia.
Estados Unidos y sus aliados europeos no cumplieron las promesas y los compromisos de expansión no territorial de la OTAN con el final de la Guerra Fría. Desde 1997, la OTAN ha incorporado a 14 países que anteriormente eran miembros o se separaron de otros países del antiguo Pacto de Varsovia.
Entre estos 14 países, tres de ellos son antiguas repúblicas soviéticas, con dos de ellos, Estonia y Letonia, compartiendo frontera con Rusia, como se muestra en el mapa:Expansión de la OTAN desde 1997
Desde un punto de vista geopolítico, geoestratégico y militar, este cambio en el mapa marca una gran diferencia y alarma a Rusia, como alarmaría a cualquier país atrapado de esta manera.
Con la disolución de la Unión Soviética, Rusia perdió 5 millones de kilómetros cuadrados y más de la mitad de su población, unos 150 millones de habitantes. Y ahora se encuentra completamente flanqueado, al oeste, por un cinturón de países que se han unido a la OTAN.
Por lo tanto, sería perfectamente esperable que Rusia reaccionara a este cambio en la geografía política regional como lo hizo . Al fin y al cabo, es una potencia nuclear que se siente acorralada y amenazada.
En los últimos años, Rusia no solo ha recuperado su poderío militar, sino que hoy en día cuenta incluso con un imbatible arsenal de misiles intercontinentales hipersónicos. Por lo tanto, en este enfrentamiento con EE.UU. y los aliados europeos, Putin apuesta por el ejercicio del poder disuasorio.
Como enseñó el asesor de seguridad de EE. UU., Zbigniew Brzezinski, Ucrania es crucial para la seguridad, la defensa y el futuro geopolítico de Rusia. Estados Unidos es muy consciente de que la adhesión de Ucrania a la OTAN significaría cruzar una línea divisoria que Moscú considera inaceptable.
El presidente Joe Biden y los gobiernos europeos han rechazado las súplicas rusas durante los últimos ocho años y el ultimátum de Putin en diciembre pasado sobre la militarización de Ucrania y la integración en la OTAN. Al contrario, actuaron como si estuvieran esperando el conflicto y, por esa postura, son los responsables de su instalación.
Por otro lado, el gobierno ucraniano incumplió el Mink Protocol de 2015. Contó con la connivencia de la Unión Europea, que había sido testigo de la firma del mencionado acuerdo.
El Gobierno chino ha actuado en la crisis con la moderación y serenidad de la que carecen EEUU y sus aliados europeos que, en lugar de contribuir a una salida negociada del conflicto, apuestan por la escalada del conflicto militar y la guerra, como ha declarado el presidente. de la Comisión Europea Ursula von der Leyen .
Al defender la posición de neutralidad de China, el Ministro de Relaciones Exteriores Wang Yi afirmó que: ?China afirma que la soberanía y la integridad territorial de todos los países deben ser respetadas y protegidas, y los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas deben observarse seriamente. Esta posición de China es coherente y clara, y se aplica igualmente a la cuestión de Ucrania?? [ aquí ].
Wang agrega que «las preocupaciones legítimas de seguridad de todos los países deben ser respetadas… [y] los requisitos legítimos de seguridad de Rusia deben tomarse en serio y abordarse adecuadamente».
El canciller chino también recordó: Hemos visto cómo actuó la OTAN para presionar a Rusia y destruir la antigua Yugoslavia en el pasado. Sin estas presiones de seguridad concretas y los despliegues militares de la OTAN alrededor del territorio ruso, Moscú no necesitaría emprender operaciones militares tan arriesgadas para responder a la amenaza de la OTAN.
Y, por tanto, argumenta que ?Ucrania debería funcionar como un puente entre Oriente y Occidente, no como una frontera en una gran lucha de poder??. Wang llama al diálogo para ?formar un mecanismo de seguridad europeo equilibrado, eficaz y sostenible??.
Al Global Times , el director del Departamento de Estudios Europeos del Instituto de Estudios Internacionales de China, Cui Hongjian, dijo que:
?Si la crisis de Ucrania la aborda principalmente Europa en lugar de EE. UU. y la OTAN, quizás se habría llevado a cabo una negociación pacífica mucho antes de que Rusia perdiera la paciencia y lanzara operaciones militares. Al menos no sería tan malo como lo es ahora ?.
La OTAN continuamente intenta expandir sus dominios en Europa del Este porque es un arma para que EE. UU. enfrente a Rusia y China y conserve su poder imperial en el mundo. La OTAN, que aún existe porque es útil a los intereses globales y estratégicos de Estados Unidos, es parte de la crisis y, en consecuencia, un obstáculo para su superación negociada y equilibrada.
[1] La Guayana Francesa también es parte de la OTAN, ya que es una región de ultramar de Francia, un elegante eufemismo de los franceses para nombrar la colonia que ellos, los modernos, civilizados y superiores a los latinoamericanos, euroasiáticos y chinos , aún mantienen.Ubicada en el noreste de América del Sur y limitando con el norte de Brasil, desde un punto de vista formal, la Guayana Francesa puede ser una base para un arsenal nuclear para una posible intervención de EE. UU. y la OTAN en el continente.
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