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La investigación de la Corte Penal Internacional (CPI) sobre los supuestos crímenes de guerra cometidos por tropas de EEUU en la guerra de Afganistán, autorizada hoy, abre la puerta a que se emitan órdenes de arresto internacionales contra altos funcionarios de Washington y miembros de la CIA.
El sumario de la Fiscalía no pone nombre a los sospechosos, pero indica que «miembros de las fuerzas armadas de Estados Unidos cometieron los crímenes de guerra de tortura y trato cruel, atentados contra la dignidad personal, violación y otras formas de violencia sexual» desde el 1 de mayo de 2013 en Afganistán.
La decisión de los jueces autoriza a la Fiscal Jefe de la CPI , Fatou Bensouda, a mandar a sus propios investigadores a Afganistán, entrevistar a víctimas y recopilar evidencias.
EE.UU. YA ADELANTÓ QUE NO COOPERARÁ CON EL TRIBUNAL pero, en caso de que alguno de sus altos funcionarios reciba una orden de arresto y vaje a uno delos 123 estados parte de la CPI, las autoridades tendrían obligación de detenerlo y enviarlo a La Haya.
Bensouda pidió abrir la investigación hace más de dos años, pero una sala de cuestiones preliminares la denegó en abril de 2019 argumentando que “no serviría a los intereses de la justicia” por sus “pocas expectativas de éxito”, en alusión a la falta de cooperación de Washington.
