Jack El Destripador -- Ramón Zavala

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En aquella sala hedionda a cigarro y sudor con el ventilador que más que refrescar el ambiente parecía batir con boconadas de aire caliente, salientes de las fauces de un legendario dragón, la meza de madera lucia rayada con más de un nombre y muchas obscenidades, sobre ella las manchas de colillas de cigarro apagadas en la madera lo que en su totalidad le daba un aspecto tétrico.

Mire fijamente a las titilante luz que amenazaba con apagarse del todo en cualquier momento, con unos moscardones girando a su alrededor, seguramente venían colados por la ventanas con sus celosías quebradas y las telas rotas, pensaba atónito como se desarrollaban los recuerdos que en voz alta salían de golpe por mis labios.

Aquella muchacha fue encontrada mutilada sus senos arrancados, sus genitales arrancados su cráneo y quijada salvajemente quebrados quien fue el culpable de tal crimen eso es algo inaudito, ese tipo de asesinatos causan conmoción en la sociedad sucede por 1991, las pruebas una fatiga militar dejada a la orilla de la quebrada llamada El Sapo junto a la víctima.

Muchos lucubraron si sería los mismos estudiantes compañeras de la joven o si fueron unos delincuentes, arrestaron al final a un militar que resultó no ser culpable cuando por fin un coronel fue el inculpado curiosamente de una múltiple violación vaya consuelo se pensó que con esto se acabaría aquella barbarie.
Muchas años pasaron pero de nuevo los atroces crímenes regresaron una mujer con sus manos amputada una madre a la que se le mató por amor o ¿cómo es esto?, digo por celos?? la verdad no sé qué decir ¿por qué?, creo que como todas las víctimas ella tuvo la culpa, su cabeza por un lado y la otra parte del cuerpo tirada en una cañera horrible escena.

Se captura a un marido después de mucho darle vueltas y largas al tema el tipo es encerrado y condenado inclusive confiesa que se le metió el diablo y por eso la mato de nuevo piensan que el culpable está en prisión.
Pero siguen las muertes hoy es una fisiculturistas con un ceno arrancado, torturada y con múltiples quebraduras, mañana es una campesina cuyas dos partes no se encuentran sino a dos quilómetros una de otra, puede ser una obrera de maquila tirada por una cañera parece que el asesino fuera una especie de demonio de siglos y se multiplicara en sus crímenes.

Estaba en estos pensamientos cuando un golpe fuerte sobre la mesa me sacó de los mismos era el fiscal que me interrogaba, sonriendo de una manera que pareciera un desquiciado me gritó, ¿Quién eres? Ni siquiera tienes rostro pareces una sombra en medio de la obscuridad de la vida, te he traído por esos crímenes ?? la mujer estaba partida en dos, pero ¿no sé qué poner por tu nombre?.
Mi nombre, pues me puedes llamar como quieras en un tiempo me llamaban Jack eso por la Inglaterra del siglo 19 bonito nombre me gustaba pero cuantas mujeres las despedacé en la impunidad a ustedes mismos no les interesó era prostitutas sobrantes del sistema se merecían eso por ser lo que eran, sus Iglesias lo justifican y ante su dios no tienen mérito.

En el lejano origen Judío del cristianismo me llamaban a lapidar la mujer en medio de la muchedumbre pero un Joven Judío los puso en vergüenza y no logramos terminar mi cometido, soy el inquisidor quemando brujas me puedes llamar como quieras, que no tengo rostro es cierto soy la invención de sus sociedades por eso vago sin rostro soy el Patriarcado en vuestras conciencias.

14/01/2019.