Foro Gaspar García Laviana, ante el 1º de Mayo

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Religión Digital

«La sociedad capitalista engendra cada vez más desigualdad»
No es verdad que los recortes en los gastos sean el único camino para salir de la crisis
Con motivo del 1º de Mayo, un día tan señalado en la historia del movimiento obrero, quisiéramos hacer patente, para que quede constancia de ello, lo que este pequeño grupo del Foro de Cristianos Gaspar García Laviana piensa sobre la situación de crisis que ocasiona tanto sufrimiento a tantísima gente.

Por lo que representa este día, en primer lugar nos unimos al rechazo de la reforma laboral en cuanto que conlleve menoscabo de los derechos adquiridos de los trabajadores y, en general, nos unimos a todas las reivindicaciones que en este día haga la clase obrera.

2. Creemos que al día de hoy el paro es el principal problema social. Entendemos que su causa original y su duración, igual que su repetición de tiempo en tiempo, radica en el neoliberalismo económico vigente en la UE, donde predominan las fuerzas conservadoras de derechas, dando origen a una sociedad capitalista que engendra cada vez más desigualdad. Nos unimos a cuantos muestran su disconformidad con esta situación y rechazan el sistema capitalista como camino para conseguir el bienestar de todos los ciudadanos.

3. Además del paro, consideramos que uno de los hechos más lamentables que vivimos en estos días son los llamados «desahucios». No podemos soportar ver cómo, después de ilusionarles con un bienestar aparente que les indujo a hipotecarse, habiéndoles dejado sin trabajo, luego les quitan la vivienda y lo que por ella habían pagado, apoyados los Bancos en unos contratos leoninos y unas leyes inicuas que los permiten. Que se puedan producir estas situaciones, deshonra a los gobiernos, a los políticos y a toda la sociedad. Por esto, y por otras muchas razones que se pueden observar en estos momentos de crisis, nos unimos a cuantos rechazan esta despiadada actuación de los bancos.

4. Nos unimos también a cuantos rechazan el actual sistema financiero, fijándonos hoy sobre todo en el hecho de que dedique el dinero que recibe del BCE, el dinero de todos, más bien a obtener fáciles beneficios que a invertirlos en la producción de bienes y servicios, concediendo los necesarios créditos a las pequeñas y medianas empresas, principales generadoras de empleo en nuestro país.

5. La economía sumergida es otro de los importantes problemas que tenemos. Además de ser un sector donde con frecuencia las condiciones de los trabajadores son de severa explotación, con salarios bajísimos y sin seguridad social…, lleva consigo la pérdida de ingresos en las arcas del Estado. Es un deber de los gobernantes encontrar los medios para hacer que afloren todas actividades productivas.

6. Tenemos que denunciar las grandes mentiras que sobre la crisis económica se han hecho circular. No es verdad que la crisis la han producido los pobres por vivir por encima de sus posibilidades: no hay más que comparar nuestro desarrollo social en estos años pasados con la media de la UE de los diecisiete. En el origen de nuestra crisis está la especulación financiera, de la cual los bancos son sus principales agentes; en el origen de la crisis está el descenso del poder adquisitivo de los trabajadores, debido ello a las políticas neoliberales que impusieron salarios reducidos y un sistema de empleo precario.

No es verdad que los recortes en los gastos sean el único camino para salir de la crisis; lo que sí es verdad es que los recortes van a empeorar la situación de los más débiles de la sociedad. Es verdad que hay que gastar mejor: menos dinero para los sueldos de los altos cargos políticos, para defensa, etc. Son sobremanera lamentables los que se han hecho en educación y sanidad que vienen a herir de frente a los más pobres.

7. Lo que sí debe hacer el Estado es ingresar más: a través de impuestos, que han de ser progresivos y eficaces. El fraude fiscal es también un problema muy importante de nuestra actual sociedad. Defraudan los que más tienen o los que más ganan, propietarios de valores, profesiones liberales… Pensamos que no se ponen los medios necesarios para impedirlo. Es una vergüenza que se toleren los paraísos fiscales, lo que evidencia cómo los políticos están al servicio de los más ricos y no del Bien Común. No entendemos que de tiempo en tiempo se produzcan amnistías fiscales. Tampoco estamos de acuerdo con los privilegios fiscales. No es una buena manera de retribuir a nadie. Se debe combatir más eficazmente la corrupción.

8. Es muy importante no tomar a la ligera el momento de las elecciones en todos los niveles en que se nos ofrecen: no es lo mismo que gobiernen unos partidos que otros, tanto en los municipios, como en las autonomías, en las naciones, o en el parlamento europeo. Hay que tener claro quiénes sirven a los intereses de los ricos y quiénes a los de los más humildes.

9. Creemos que todas las comunidades católicas están obligadas a ejercer dentro de la sociedad su función profética de denuncia, y sobre todo sus jerarquías, conjuntamente y cada obispo en su diócesis. Nosotros creemos que el causante de los males que asolan hoy a tantas familias es principalmente el poder financiero y todo el entramado económico y político con el que se ejerce.

10. La Iglesia debiera rehusar las aportaciones de los bancos, pues su dinero con frecuencia es producto de injusticias, de intereses abusivos, de despiadados desahucios… Los ahorros obligados para futuros gastos debieran depositarse en las «Bancas ?ticas» que están surgiendo y no tienen como criterio de inversión la obtención del máximo beneficio. Esto debiéramos hacerlo todos.