Muchos de los postulados que se pretenden cristianos a mí no me convencen»
El catedrático de ?tica y teólogo progresista Enrique Miret Magdalena falleció ayer en Madrid a los 95 años de edad tras un largo periodo de enfermedad. El que fuera presidente de la Asociación de Teólogos Juan XXIII y presidente de honor de Mensajeros de la Paz deja un legado de miles de artículos de prensa y una veintena de libros en los que expuso su heterodoxa visión del catolicismo y sus ideas progresistas y renovadoras sobre la Iglesia.
Enrique Miret Magdalena iba para jesuita, y así lo contó en varias ocasiones, cuando estalló la guerra civil, lo que le hizo pasar la contienda escondido en Madrid, refugiado en la embajada de Panamá ante el temor de ser represaliado por aparecer en las listas de la congregación. Tal vez fue ese intento frustrado de pertenecer a la jerarquía de la Iglesia lo que le impulsó a doctorarse en Química, aunque no tardó en dedicarse a la ?tica y la Teología, materias de las que era catedrático.
Más de 2.000 artículos
Con esta formación comenzó a escribir para publicaciones católicas progresistas y, en general para diversos medios de comunicación (Temas para el debate, Informaciones, El Independiente, El Imparcial, Diario 16, Le Monde, Cambio 16, Tiempo, Menores (revista de la que fue fundador), El País o El Periódico de Cataluña, entre otros) con los que ha sumado más de 2000 artículos.
«Hombre de diálogo»
Miret, que se consideraba a sí mismo un ?hombre de diálogo?? estaba especializado en religiones orientales y sus vínculos con el cristianismo y escribió una veintena de libros de tema social, cultural y religioso en los que exponía su visión crítica del catolicismo y sus ideas progresistas. «Muchos de los postulados que se pretenden cristianos a mí no me convencen; el mensaje de Jesús realmente es muy breve y todo lo demás es discutible», aseguraba el teólogo, que consiguió difundir sus ideas entre los seglares y sacar la teología del ámbito meramente clerical.
Méritos profesionales
Entre sus méritos profesionales, Miret Magdalena fue profesor en la Universidad Pontificia de Salamanca y en la Universidad de Comillas. Además fue presidente de la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa (COPYME) en los años 70 y director general de Protección de Menores durante cuatro años (1982-1986). También era presidente honorario de la ONG Mensajeros de la Paz y vocal fundador de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado. Cuando en 1996 fue elegido presidente de la Asociación de Teólogos Progresistas Juan XXIII, aseguró: ?Os equivocáis, yo soy un antiteólogo??.
«Se necesitan mejores curas»
El teólogo consideraba que ?se necesitan no más curas, sino mejores curas que escuchen a la gente??, e hizo suya la máxima de Baltasar Gracián: ?Los fieles no deben ser demasiado obedientes, no vaya a ser que con eso perjudiquen a la Iglesia??. Padre de siete hijos, en 1974 recibió el premio Popular de Periodismo del diario Pueblo y en septiembre de 2006 la Medalla de la Orden Civil de la Solidaridad Social del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
Será incinerado hoy
Sus restos mortales se encuentran en el Tanatorio de la Paz, en Alcobendas (Madrid), donde este mismo martes será incinerado en una ceremonia familiar.