Un pequeño grupo de hermanos vive en Estocolmo desde el principio de febrero; fueron invitados por los responsables de las Iglesias de la ciudad. Cada mañana, la oración tiene lugar en la iglesia de Ersta, cerca del centro. A continuación, hay visitas a los ancianos, al hospital local o encuentros con los estudiantes de la universidad. Al mediodía, alrededor de 70 a 90 personas se reúnen cada día en la iglesia Maria Magdalena a Slussen, exactamente del otro lado del estuario desde la vieja ciudad.
Cada uno es acogido allí con un almuerzo simple en el sótano donde el club de los jóvenes se reúne habitualmente. ¡Jóvenes y ancianos, abuelas, estudiantes, trabajadores y niños: esta amistad alrededor de la mesa pasa a ser como una parábola del Reino! Por la tarde y la noche, los hermanos, así como de los voluntarios de Taizé, van en distintas parroquias de Estocolmo y los alrededores para encontrarse con grupos de jóvenes, clases de confirmación, o para otros encuentros con jóvenes. Es importante encontrarse, intercambiar y rezar juntos: es una manera de sostenerse en nuestra camino de fe.
Un encuentro en mayo
Esta presencia de los hermanos en Estocolmo se sitúa en la perspectiva de una nueva etapa de la peregrinación de confianza a través de la tierra. Del 3 al 6 de mayo de 2007, el hermano Alois se les unirá para un encuentro de cuatro días para jóvenes de Suecia y los otros países nórdicos sobre el tema «elegir amar, elegir la esperanza».
Los participantes se alojarán en familias de toda la región de Estocolmo; el programa matutino tendrá lugar en las parroquias locales. La gente los ha acogido de manera tan generosa que durante la primera semana de su estancia, los hermanos pudieron encontrar un número suficiente de comunidades parroquiales para acoger el encuentro de mayo.
La oración de mediodía tendrá lugar en una iglesia del centro, seguida de talleres sobre distintos temas y de la oración de la noche durante la cual el hermano Alois hablará.
¿Porqué ir a un encuentro en Estocolmo mientras que otros lugares serían al parecer más interesantes para jóvenes cristianos de los países nórdicos? ¿Quizá están en un período en que, tal como ocurrió con los cristianos de la Iglesia de los orígenes, se vuelve cada vez más importante que los cristianos se visiten? De esta manera, nos confirmamos en la fe y descubrimos una parte de la vida de otras comunidades cristianas, que pueden quizá conducirlos a ir más lejos en nuestro propio compromiso. ¿Cuánto jóvenes suecos, que viven fuera de Estocolmo, saben algo de la vida de la Iglesia en la ciudad? Esta es una ocasión de contribuir a la preparación de una vida de comunión.
¿Qué es lo que más llama la atención?
¿Qué es lo que más nos ha llamado la atención durante estas primeras semanas? En primer lugar, en un país que tiende a secularizase hay una enorme sed de comunión y oración entre los jóvenes. En segundo lugar, hay una generosidad en la sociedad sueca, que se traduce en la hospitalidad espontánea ofrecida a los que vienen a golpear la puerta. De manera más general, es evidente en los gestos para con los inmigrantes y los que vienen del exterior. La disponibilidad de las distintas Iglesias en Suecia para buscar cómo responder a estas cuestiones esta muy de manifiesto. Cuando los cristianos buscan cómo vivir el Evangelio en la sociedad moderna, los caminos pueden repentinamente abrirse de manera inesperada. Y la Iglesia, lejos estar preocupada de sí misma, puede convertirse en un lugar de acogida para todos.