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La Policía española impidió ayer al Movimiento 15-M instalar una mesa de información en la madrileña Puerta del Sol, sitio donde nació hace casi un año esa plataforma social, conocida también como los indignados.
Agentes municipales de ese cuerpo represivo prohibieron esta noche a integrantes del colectivo reivindicativo colocar una pequeña mesa plegable junto a la valla de la estatua ecuestre de Carlos III, ubicada en la emblemática plaza capitalina.
Después que los gendarmes les ordenasen retirar el pequeño puesto de información, lo allí reunidos decidieron colgarse los carteles y periódicos y pasearse con ellos por la Puerta del Sol, de acuerdo con la agencia estatal de noticias EFE.
El 15-M, que debe su nombre a las multitudinarias manifestaciones del 15 de mayo de 2011 contra la clase política española, anunció en los últimos días en Internet una serie de actos a partir del venidero día 12 para el celebrar el aniversario de su nacimiento.
Entre sus acciones, tiene previsto volver a acampar en Sol durante al menos tres días (entre el 12 y 15 de mayo), con el fin de reclamar al gobierno conservador de Mariano Rajoy un cambio social, político y económico.
La intención de los indignados es que en esas fechas la Puerta del Sol se convierta en una asamblea permanente, según se informa en la web del movimiento.
Para el sábado de la próxima semana convocaron una manifestación, que comenzará en la noche en cuatro puntos diferentes de la capital española: San Bernardo, Atocha, Cibeles y Plaza de Oriente.
Los organizadores quieren que todos los participantes en la marcha confluyan en esas cuatro plazas para finalizar con la llegada simultánea a Sol.
Tanto el ejecutivo central como el municipal, ambos dirigidos por el derechista Partido Popular, advirtieron al 15-M que no permitirán una nueva acampada.