El rincón del peregrino
De nuestro egoísmo hemos, invisibilizando a los pobres, para perpetuar por siempre su pobreza.
¡Habrá un día en el que los pobres asaltaran las conciencias!
Que este mundo no es el de Dios,hasta que hagamos su verdadera casa, la casa común.
¡Detente, Nos salvamos con los pobres, con los de Jesús!
Ellos nos salvan
A ti y a mi
Y nos condenamos sin ellos.
Yo y Tú. Ver noticia original en …