Las denuncias de pederastia se refieren en su mayoría a hechos cometidos en el pasado, según la agencia AP
Se trata de la primera vez que la Santa Sede emprende acciones de este tipo contra miembros del grupo ultracatólico, tras el escándalo de su fundador Marcial Maciel
El Vaticano está investigando a siete sacerdotes de la congregación ultracatólica de los Legionarios de Cristo por supuestos abusos sexuales a menores y a dos más por otros presuntos delitos, según informa la agencia Associated Press. Se trata de la primera vez que la Santa Sede emprende acciones de este tipo contra miembros de ese grupo religioso, después del escándalo desatado al conocerse que su fundador, Marcial Maciel, abusó de seminaristas durante décadas, tuvo tres hijos con dos mujeres y plagió el libro de cabecera de la organización.
En un comunicado este viernes a la citada agencia de noticias, los Legionarios de Cristo confirman haber comunicado a la Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano, organismo encargado de investigar los presuntos casos de pederastia en el seno de la Iglesia, las acusaciones contra los siete sacerdotes. Según el grupo, tales denuncias se refieren a hechos ocurridos hace décadas, siendo solo uno reciente. «Hace unos años, en varios países, responsables de los Legionarios de Cristo recibieron algunas denuncias de actos gravemente inmorales y más infracciones serias cometidos por algunos legionarios», señala la nota.
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Otros dos sacerdotes están siendo investigados por el Vaticano por supuestas violaciones sacramentales que se cree tienen que ver con la utilización de la dirección espiritual para mantener relaciones sexuales con mujeres, según AP.
El escándalo de Maciel -fallecido en 2008 a los 87 años- es uno de los más graves vividos en el seno de la Iglesia católica en el siglo XX, cuando el religioso mexicano era ensalzado como modelo de fiel a seguir por Juan Pablo II. Las nuevas revelaciones suponen otro golpe para la congregación, intervenida desde 2010 por un comisario pontificio externo a la Legión, Velasio de Paolis, antiguo jefe de las finanzas vaticanas, para renovar el grupo tras salir a la luz la vida de Maciel.
Sin embargo, De Paolis jugó un importante papel en la impunidad vaticana de Maciel. Como jurista y experto en Derecho Canónico, trabajaba en la Congregación para la Doctrina de la Fe cuando llegaron a Roma, a principios de los años ochenta, las segundas denuncias de sacerdotes que acusaban de pederastia a Maciel.
Llamado a resolver, De Paolis firmó la absolución del cura mexicano y, según afirma una fuente vaticana, lo hizo por indicación del secretario del Papa Wojtyla, Stanislaw Dzwiwisz. Aquella segunda absolución -la primera ocurrió en los cincuenta- sirvió a Maciel como aval oficial para seguir cometiendo delitos.
