El estudio realizado por un grupo internacional de científicos afirmó que la epidemia impedirá lograr al menos cinco de esos objetivos: reducir a la mitad el hambre y la extrema pobreza, disminuir la mortandad infantil, conseguir la educación primaria universal, mejorar la salud materna, y encontrar la cura de enfermedades infecciosas, como la tuberculosis y la malaria.
Con motivo de la conmemoración del Día Mundial del SIDA, 1 de diciembre, la organización humanitaria Médicos sin Fronteras (MSF) exigió a las instituciones internacionales que se tomen en serio el problema del elevado precio de los nuevos medicamentos contra el SIDA, y favorezcan la reducción de su coste para que sean accesibles a más personas, ya que se estima que hay 40 millones de infectados y en los países pobres requieren un tratamiento urgente. Las organizaciones internacionales, los donantes y la industria deben coordinar sus estrategias para asegurar el acceso universal a estos tratamientos vitales.
Denunció cómo con los sistemas de protección de patentes que protegen a la industria farmacéutica se han perdido todos los logros alcanzados el los últimos años, por lo tanto instan a no dejar en manos de las compañías farmacéuticas la solución de este problema ya que solamente miran aumentar sus beneficios.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), a enero del año 2006 y desde que se le reconoció como tal en junio de 1981, la epidemia del SIDA se ha cobrado la vida de más de 25 millones de personas. Sólo en el 2005, el SIDA mató entre 2,4 y 3,3 millones de personas, de las cuales más de 570.000 eran niños/as.