Le contesta Jesús: —Te aseguro que, si uno no nace de agua y Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. (Cfr. Jn. 35-8)
Montevideo 16 de mayo de 2011 ?
En medio de lo que se percibe una profunda crisis sistémica auspiciada en dinámicas despiadadas, crueles e inhumanas, justamente provocado por el neoliberalismo constituido en una verdadera religión dominante??Que ha sido propiciada por una verdadera crisis civilizacional, hace falta que todos hagamos aporte, para una síntesis cultural, que abarca desde la epistemología científica, hasta los paradigmas de la economía??
Este aporte desde el Cristianismo, debe ser hecho en consonancia, con aquello que la comunidad Universal siente como aquello que nos fue entregado, (enseñado y trasmitido), por Jesús de Nazareth, porque es desde el discipulado en donde los cristianos, entendemos este aporte para una nueva síntesis cultural, por eso vamos a usar el aporte que en este sentido un creyente cristiano (muy especial por cierto) nos hace llegar, porque en nuestra reflexión, ese aporte que nos hace a todos este creyente, es sin lugar a dudas compartible como un aporte, que de alguna manera recoge muchas de nuestras más profundos sentires y aspiraciones??
Veamos ese aporte?? «destacó que «la verdad, el amor, la justicia, indicadas por la «Mater et magistra», junto con el principio del destino universal de los bienes, como criterios fundamentales para superar los desequilibrios sociales y culturales, siguen siendo los pilares para interpretar y encontrar soluciones a los desequilibrios internos a la globalización actual. Frente a estos desequilibrios, es necesario recuperar una «razón integral» que haga renacer el pensamiento y la ética. (…) Hay que desarrollar síntesis culturales humanistas abiertas a la trascendencia, mediante una nueva evangelización».*
Ciertamente esta nuestra etapa de la historia, ha hecho en sus dinámicas, Espirituales, afectivas, sociales, económicas y políticas, un gran pecado colectivo??Si se quiere una tiniebla, un impulso hacia las sombras, que no es en realidad el vivir sin Dios, sino el adorar a un dios espurio, que aliena toda relación humana??Ese dios es el capital??con su sacerdote el mercado y en sus altares de miseria de hambre, ha sacrificado a millones de seres humanos, es un dios sediento de sangre??
Por eso el desprecio que nuestra cultura realiza del Dios de la Vida, esta devastando el planeta hogar, esta sembrando de muerte la era??y es necesario reformular una síntesis cultural, que rescate al Dios de la Vida, pero una de las características de estos tiempo es la fragmentación, social, económica y política, de tal manera, que hablamos lenguajes diferentes y somos incapaces de unirnos en la construcción de nueva cultura??estamos tan adheridos a lo viejo??en una diversidad de dispersiones que no centran en lo individual y menosprecian lo de todos, lo comunitario, nuestra pertenecía universal a la humanidad y de esta a toda la creación??.validando en salvase quien pueda??validando este modelo homicida, depredar e profundamente injusto??Por eso el retomar??desde aquello que hemos reconocido como sabiduría??en la Encíclica de Juan XXIII, nos llama a poner en el centro de esta cultura, a un Dios, que es comunidad??y que por lo tanto nos llama a vincular como comunidad universal??y pone en el centro de esta síntesis valores que deberemos ir concretando en las vinculaciones sistémicas y universales, a partir de su vivenciación, personal, familiar, barrial y social, esto valores son, el valor inmenso de la vida, el amor, la justicia?? ?junto con el principio del destino universal de los bienes??
Al decir esto se habla de lo económico, pero no sólo, se habla de la atención, la energía, el tiempo??superando una posible síntesis ideológica, se sitúa en el área de las actitudes??de los valores profundos, que alimentan como un río subterráneo las actitudes y vinculaciones humanas?? En la línea de lo enseñado por el Libro de los Hechos???? Todo lo tenían en común???? (Cfr. Hch. 2,44; 4,32)??No ya sólo como una postura política??sin como parte de esa nueva síntesis cultural, que entendemos el libro de los hechos lo presenta como un valor del Reino????Koinonia????
Pero este hermano nos aporta algo más?? «De los diversos desequilibrios globales que caracterizan a nuestra época, se alimentan las disparidades, las diferencias de riqueza, las desigualdades, creando problemas de justicia y de distribución equitativa de los recursos y oportunidades, especialmente en relación con los pobres».*
Este aporte que no sólo recoge una valoración de esta cultura vieja, sino que proyecta el abordaje epistemológico, para la construcción de una nueva cultura??Que esa en consonancia, con lo vivido, enseñado, trasmitido y entregado por Jesús de Nazareth??Que es construir una nueva cultura desde los pobres, desde los pequeños, desde la victimas de esta terrible cultura en la que vivimos hoy, que esta devorando la vida sobre el planeta, intentando mercantilizarla??
Justamente en esa línea de depredar la vida, para mercantilizarla buscando la acumulación de la renta, este notable cristiano nos dice?? «??no son menos preocupantes los fenómenos relacionados con una finanzas que, tras la fase más aguda de la crisis, ha vuelto a practicar con ansia contratos de crédito que a menudo consienten una especulación sin límites. (…) Del mismo modo, el aumento de los precios de los recursos energéticos primarios (…) llega a tener consecuencias negativas sobre el medio ambiente y sobre el mismo ser humano». *
La especulación, el aumento de los recursos energéticos y alimentarios y la depredación ecosistema, con la destrucción de los equilibrios del medio ambiente y de los colectivos humanos, son un sello de esta cultura, que sostiene a este sistema y son la causa y consecuencia directa de la practica de las grandes multinacionales y del capitalismo neoliberal de acumular la mayor cantidad de renta, lo que crea esta dinámica de muerte??
Otro enorme aporte que se nos hace a esta futura síntesis cultural??nos dice?? «La cuestión social actual -añadió- es sin duda una cuestión de justicia social mundial (…), de distribución equitativa de los recursos materiales e inmateriales, de globalización de la democracia sustancial, social y participativa». Dicha justicia, continuó, «no es posible lograrla apoyándose en el mero consenso social, sin reconocer que para que sea duradero, debe estar enraizado en el bien humano universal». *
Una nueva síntesis cultural que logre liberarnos de la injusticia, de la inequidad de la cuestión social??y nos ayude a dar el paso hacia una justicia distributiva global??de todos los recursos y eso incluye el empoderamiento de los pueblos?? No es sólo un barniz??no se puede construir, sin el hombre universal, no se sacude al hombre viejo, al que ambiciona ser más, tener más y poder más que los otros seres vivos??(Cfr. Lc. 4,1-13)??
Otro aporte, que nos parece que tiene una raíz eclesiología??y que nos da una verdadera epistemológica, para lo que muchos teólogos han dado en llamar eclesiogénesis??»Refiriéndose a los medios para la difusión de la Doctrina social de la Iglesia, el Papa indicó que la Iglesia cuenta con «las actividades de sus instituciones culturales, los programas de educación religiosa y de catequesis social de las parroquias, los medios de comunicación y la labor de anuncio y testimonio de los laicos». Estos deben estar preparados espiritual, profesional y éticamente». *
Al servicio de la construcción de esta nueva síntesis cultural y de su vivenciación, que en realidad significarán para nosotros un verdadero salto civilizacional, estaremos??con toda nuestras debilidades y miserias??junto a todos los hombres de buena voluntad, los que intentamos ser los seguidores del camino de Jesús de Nazareth??pero para esto es necesario, por aquellos que formamos parte de la Iglesia, reconfigurar la misma Iglesia, convertirla a ella misma a esta nueva síntesis cultural??
Esto requerirá, despojarse, salir a la intemperie y buscar en medio de los que más sufren la presencia del Señor de la Historia??y ponernos a servirlo, en el servicio a nuestros hermanos??en la construcción de esta nueva civilización del amor??Nos parece que esta actitud, es la que nos llama a tener Aparecida cuando nos habla de Conversión Pastoral, que es mucho más que un cambio de estructura, es un abrir el corazón de la comunidad, local y universal, a la voz del Señor, que le invita a cambiar el corazón??(Cfr. Documento Final de Aparecida Nº 366-367)??
En este sentido, las comunidades eclesiales de base??que se reúnen en las casas, resultan absolutamente indispensables, como aquellos que siendo Iglesia, al decir de entrañable y querido Mons. Angelelli, con un oído en el Evangelio y otro en el pueblo??Porque sus integrantes, sufren, luchan y sueñan con el pueblo y desde el??son capaces de percibir la presencia del Resucitado??
* http://visnews-es.blogspot.com/2011/05/sintesis-culturales-humanistas-abiertas.html
(Información recibida de la Red Mundial de Comunidades Eclesiales de Base)