El Papa deja Tierra Santa denunciando el «brutal genocidio» de los judíos por parte de los nazis

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El Periódico

El Pontífice pide que la creación de un estado Palestino sea una «realidad y no un sueño»
Benedicto XVI reinvindica ante el patriarca ortodoxo de Israel la unión de las confesiones cristianas
Benedicto XVI ha finalizado su peregrinaje a Tierra Santa denunciando, en una visita al Yad Vashem de Jerusalén, que el genocidio nazi «nunca debe ser olvidado o negado».
Según ha declarado el Pontífice, fue un «espantoso episodio de la Historia» en el que «tantos judíos fueron brutalmente exterminados bajo un régimen sin Dios que propagó una ideología de antisemitismo y odio».

Solución al conflicto

Benedicto XVI ha hecho además un llamamiento para que la creación de un Estado palestino deje de ser un «sueño» y se convierta en una «realidad» que lleve la paz a la región.

«Permitidme hacer este llamamiento a toda la gente de estas tierras: ¡No más sangre derramada! ¡No más luchas! ¡No más terrorismo! ¡No más guerra! Dejadnos romper el círculo vicioso de la violencia. Dejad que haya paz duradera basada en la justicia y una genuina reconciliación», ha exclamado el Papa en el aeropuerto de Tel Aviv, justo antes de volar de regreso a Roma.

El Pontífice ha pedido tanto el «reconocimiento universal de que el Estado de Israel tiene derecho a existir y a gozar de paz y seguridad en fronteras internacionalmente reconocidas» como el «derecho del pueblo palestino a un hogar nacional soberano e independiente, a vivir con dignidad y a viajar libremente».

«Dejad que la solución de los dos Estados se convierta en una realidad y no siga siendo un sueño», ha pedido frente al presidente de Israel, Simón Peres, y al primer ministro, Benjamín Netanyahu, quien rechaza esa fórmula.

Ecumenismo

Benedicto XVI se ha entrevistado además con el patriarca ortodoxo de Jerusalén, Teófilo III, en el Santo Sepulcro, donde ha dicho que todos los seguidores de Cristo deben «redoblar» los esfuerzos «para perfeccionar la comunión» o unidad de todos los cristianos, ya que la actual división confesional «es una vergüenza».

El Pontífice ha añadido que, a la hora de presentar el mensaje de reconciliación de Cristo, los cristianos «experimentamos la vergüenza de nuestra división».

«Tenemos que encontrar la fuerza de redoblar nuestro compromiso para perfeccionar nuestra comunión, para hacerla completa», ha dicho el Obispo de Roma.