?Los católicos y católicas esperamos tener en nuestro compromiso eclesial el mismo espacio que tenemos en la sociedad?.
?Atreverse a Resurgir? es el lema del 98º Katholikentag (Día de los/as Católicos/as) que ha tenido lugar en Mannheim del 16 al 20 de mayo. Su intención: inyectar energía en la Iglesia y en la sociedad y recordar la inauguración del Concilio Vaticano II hace ahora 50 años.
A lo largo de cinco días los más de 80.000 asistentes han participado en un millar de eventos enmarcados en cuatro ámbitos temáticos: caminos para una iglesia con futuro, senderos de justicia, hacia una cultura de la vida y una cultura de la responsabilidad por el bien común. En los doce centros principales, distribuidos por la ciudad de Mannheim, los asistentes podían asistir a actividades intergeneracionales y de familia, sobre hombres y mujeres, jóvenes, Biblia y espiritualidad, ecumenismo, diálogo con el Judaismo ycon el Islam, iglesias locales, responsabilidad global, diálogo con la ciencia, integración y encuentro entre culturas o iglesia, economía y mundo laboral.
Los organizadores han resaltado la vitalidad de la iglesia en este encuentro festivo. Vitalidad que recae en su mayoría en los cristianos y cristianas laicos comprometidos, motivo por el que se ha escuchado en varias ocasiones la demanda de mayor reconocimiento y posibiidades de actuación para los laicos: ?los católicos y católicas esperamos contar en nuestro compromiso eclesial con el mismo espacio que contamos en la sociedad?. Entre los desafíos más importantes a los que se enfrenta la sociedad se encontrarían los cambios demográficos, el cambio climático y la integración. Los políticos presentes en el acto, también han resaltado que en esta tarea y, para superar la crisis actual, es necesario el compromiso de los cristianos.
En lo que al resurgimiento dentro de la iglesia se refiere, estas jornadas, en palabras de Alois Glück _responsable de la organización_, har revelado la existencia de un gran malestar entre los católicos alemanes, aunque ha insitido en que laicos, sacerdotes y obispos tienen mucho en común. De todos depende la credibilidad de la Iglesia y son muchos los temas a abordar: la moral sexual, la atención y posibilidad de comulgar para matrimonios entre feligreses de diferentes religiones, la situación de los nuevos matrimonios de divorciados, etc.
Lo que más preocupa a los católicos alemanes es el futuro de sus comunidades, por lo que Glück apela a obispos y responsables a que reformen las estructuras de sus diócesis y comunidades parroquiales, con el fin de que la iglesia no se aleje de la gente. En los próximos meses, la conferencia episcopal tendrá que abordar uno de los temas más espinosos: el papel de la mujer en la Iglesia. Con voluntad de diálogo y encuentro iremos construyendo una Iglesia ?que escuche, aprenda y sirva?. ?Ni un paso atrás con respecto al Concilio Vaticano II?.
Más información: http://www.katholikentag.de/