Ven, Espíritu Santo. Despierta nuestra fe débil, pequeña y vacilante. Enséñanos a vivir confiando en el amor insondable de Dios, nuestro Padre, a todos sus hijos e hijas, estén dentro o fuera de tu Iglesia. Si se apaga esta fe en nuestros corazones, pronto morirá también en nuestras comunidades e iglesias.··· Ver noticia ···
Domingo 24 de mayo, Pentecostés – B (Juan 20,19-23): Invocación al Espíritu -- José Antonio Pagola
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