Domingo 12 de junio de 2016, 11º del tiempo Ordinario

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Koinonía

11 del tiempo ordinarioCOnofre, anacoreta (400)
En la primera lectura, David, el rey elegido por Dios, ha pecado gravemente. No sólo ha cometido adulterio con Betsabé, esposa de uno de sus generales más leales, sino que además ha hecho matar al esposo engañado. Se ha mofado así del mismo Dios, al arrogarse un derecho abusivo sobre la vida y la muerte en beneficio de sus deseos depravados. Esto merece un castigo. Pero el rey reconoce su delito y se manifiesta humildemente arrepentido. Muestra así la profundidad de su fe, real a pesar de su pecado. Por eso Dios lo perdona. David quedará para siempre como el ejemplo vivo del hombre que, sobrepasando sus miserias, se ha situado en la dinámica divina que, sin desatender la justicia, aplica la misericordia y el perdón a quien se arrepiente, incluso por delitos enormes. ··· Ver noticia ···