«Debéis acogerlo con el corazón»
Los vecinos están contentos pero no olvidarán nunca a Gabriel, el cura que cambió sus vidas
«También le han castigado»
ALBU?OL ya tiene cura. Cientos de vecinos llenaron ayer la iglesia para recibirlo. En las caras de los albuñolenses podía leerse la alegría que trae la calma tras una gran tempestad. Han estado casi un mes sin sacramentos, lo que equivale a cuatro domingos sin misa. Por ello cientos de fieles se acercaron impacientes al templo para acoger al nuevo párroco, Manuel España Hidalgo.
El sustituto de Gabriel Castillo conoce bien a su antecesor y además viene del pueblo natal de éste, Albuñuelas, donde ha sido cura durante nueve años. Manuel España, que a partir de ahora será don Manuel, en Albuñol, reconoció estar «un poco nervioso por los cambios» ya que, recibió la noticia de su traslado al pueblo hace muy pocos días. Muchos albuñolenses desean que don Manuel siga los pasos de su adorado Gabriel ya que, como Encarna bastantes vecinos piensan que «era un cura estupendo». Ella dice que nunca va a olvidar los años junto al ex párroco, pero parece ser que poco a poco van aceptando que, en la iglesia de Albuñol empieza un nuevo ciclo.
También los miembros de la plataforma que ha luchado en contra del traslado de Gabriel Castillo, aseguraron ayer que han recibido «con los brazos abiertos» a don Manuel y lo saludaron como muchos vecinos de la localidad, después de la misa.
«Debéis acogerlo con el corazón» señaló el vicario general de la Diócesis granadina, Manuel Reyes, que se encargó de oficiar la misa en la que presentó a los a los vecinos de Albuñol su nuevo cura. «Las discusiones y enfrentamientos deben ser superados con sabiduría cristiana» recordó Reyes a los fieles que acudieron a misa como hacían cada domingo antes de que fuese trasladado su adorado cura, Gabriel Castillo.
Además, subrayó que «la iglesia es la casa de todos» y que el nuevo párroco «los va a acoger a todos: acogerá a los niños, a los jóvenes, acompañará a los matrimonios, amará a los enfermos, acogerá a los pobres, a los inmigrantes y acompañará, también a las religiosas que tanta tradición tienen en este pueblo». El vicario general de la Diócesis granadina, está convencido de que el sustituto de Gabriel «lo hará muy bien».
Saludar al cura
Fueron muchos los albuñolenses que decidieron acercarse después de la misa para saludar personalmente a quien será a partir de ahora su cura. Por otro lado, numerosos vecinos de Albuñuelas y de los demás pueblos a los que ha atendido Manuel España hasta ahora, asistieron ayer, incluso entre lágrimas, a la iglesia de Albuñol para apoyar y despedirse de su párroco.
Manuel España aseguró que a pesar de los nervios «estoy contentísimo» y quiso «agradecer la acogida y el cariño» que recibió ayer. Manuel España, de 52 años de edad y con una larga trayectoria como cura se mostró tímido ante los medios de comunicación que se acercaron a la iglesia de Albuñol y aseguro que «no entiendo por qué eso es tanta noticia». Don Manuel sabe que su tarea como sucesor de Gabriel, que tantas pasiones ha levantado en Albuñol, no será fácil. «Los vecinos pueden estar tranquilos y continuar esperanzados porque seguiré la línea del Evangelio».
Durante los casi treinta días que el pueblo ha estado sin párroco se han acumulado las misas que a partir de ahora oficiará don Manuel con el cariño, sin duda, de los fieles de Albuñol.