Alai
¿La democracia se está muriendo de odio o de hambre? ¿Cuánto de su crisis explican los discursos intolerantes y cuánto la dura economía política? ¿Qué alimenta las bajas pasiones que canalizan de manera invariable las nuevas fuerzas reaccionarias?
Toda democracia nace de una dictadura o de la guerra. Y sería muy difícil, cuando no imposible, abordar este fenómeno sin hablar de las muy diferentes definiciones que el hecho democrático ha adoptado en las últimas décadas en América Latina y el Caribe, en procesos que no siempre fueron simultáneos, y que jamás fueron idénticos. Ver noticia original en …