Nunca me ha gustado el gnosticismo, sobre todo, por su desprecio o, al menos, descuido del espesor de la historia. Y ahora, en pleno ?boom?? de misas telemáticas, tengo la sensación de que puede irrumpir con una fuerza inusitada, si acabamos trasladando lo que es propio de tiempos excepcionales (dichas eucaristías telemáticas) a lo habitual (a las presenciales). Y como, contrapunto reactivo, tampoco me ha gustado nunca la profusión desmedida de celebraciones eucarísticas para llegar a cuantos más, mejor; no importando hacer del cura un funcionario (cuando no, un autómata) eucarístico. ··· Ver noticia ···
Registrarse
¡Bienvenido! Ingresa en tu cuenta
¿Olvidaste tu contraseña? consigue ayuda
Recuperación de contraseña
Recupera tu contraseña
Se te ha enviado una contraseña por correo electrónico.