Conclusiones tras la manifestación por la laicidad -- Borja Aguirre

0
31

Como miembro de Redes Cristianas, estas son algunas reflexiones que me surgen tras la manifestación por la laicidad, en la que participé como parte de la organización; son opiniones puramente personales y no representan a ningún colectivo.

– Considero una noticia muy buena la alta participación de gente en la manifestación, en pleno agosto. Las calles estaban literalmente inundadas. Hubo mucha prensa, también internacional (me entrevistaron una televisión italiana y una radio alemana), se vio mucho interés de otros países por esta manifestación, y este tipo de cosas son contagiosas. Creo que esta manifestación va a ayudar a que vayan creciendo en todas partes las protestas ante los privilegios eclesiales.

– Otro hecho muy positivo es que se empiece a aceptar con naturalidad que exista una plataforma por el laicismo en el que participan colectivos cristianos. Creo que esto es un hecho que va a tener mucha más importancia en el futuro de la que ahora nos pueda parecer: a algunos colectivos cristianos se nos comienza a ubicar socialmente en lugares inesperados, y eso va a cambiarnos muchas formas de actuar, de pensar… y quizá de rezar. He podido tener conversaciones muy interesantes con personas agnósticas o ateas. Algo está cambiando poco a poco.

– Me parece increíble la manera en que la Delegación de Gobierno y el Ayuntamiento planificaron esta manifestación. Una manifestación de miles de personas que tiene que sortear motocicletas, autobuses de donación de sangre, etc. Ni un vehículo policial en la cabeza (ni una miserable motocicleta)… No había visto algo así en la vida, y he ido a cientos de manifestaciones. Resultado: la manifestación se atasca, se rompe, se pierde… Para mí es bastante evidente que las autoridades estaban deseando que hubiese tensiones. Creo que hay que denunciarlo con energía, con todos los medios que tengamos, como está haciendo Europa Laica

– Por otra parte, y unido a lo anterior, pienso que los colectivos organizadores pecamos de candidez en el planteamiento de la manifestación. Deberíamos haber estado más personas de la propia manifestación para controlar el tema del orden. Estuvimos poca gente, y muy concentrados en la cabecera. Incluso deberíamos haber hecho un cordón humano. Si hubieramos estado más gente para el control del orden, hubieramos evitado las respuestas de los manifestantes a los peregrinos del jmj que vinieron a provocar.
Creo que este es un aprendizaje fundamental que debemos tener. La estrategia de las élites, según vaya creciendo la confrontación social es muy clara: permitir el choque callejero entre masas sociales enfrentadas, para posteriormente utilizar la represión policial como ‘salvadora’ de la situación. En otros países del mundo este es el pan de cada día.
A partir de ahora, siempre que realicemos una acción pública, del tamaño que sea, tenemos que ser capaces de gestionar bien (por nosotros mismos, sin contar con fuerzas de orden público) el control de la situación, para que nunca se nos pueda ir de las manos.

– Es cierto que se escucharon gritos fuera de tono dirigidos hacia los peregrinos del jmj a lo largo de la manifestación; amenazas yo no ví ninguna, y agresiones menos aún, aunque es posible que haya existido alguna. Por otra parte, una vez terminada la manifestación, mucha gente se quedó en Sol, y la tensión fue creciendo. Es necesario condenar todo esto con fuerza, y con buenos argumentos; caer en provocaciones es darle armas a quienes mañana nos van a reprimir.
Tampoco me gustaron personalmente el contenido de algunas pancartas, y de algunas pintadas que ví. Reconozco que me sorprendió bastante la rudeza de los propios manifestantes. Largos años de desagravios de la Iglesia hacia determinados colectivos, y la tensión acumulada de varias semanas de represión policial hacia el 15M, sin duda habían generado el caldo de cultivo de una agresividad latente.
Por otra parte, no tengo ninguna duda de que la mayor parte de las provocaciones provinieron de los propios contra-manifestantes, algo que la mayor parte de la prensa está ocultando. A lo largo de todo el recorrido, sin interrupción, se veían participantes del jmj, y algunos energúmenos, gritando y provocando. En el mejor de los casos gritaban ‘viva el Papa’ y enseñaban rosarios, en otros casos daban cortes de manga, insultaban, y pude ver varios casos de agresiones, como este chaval que recibe un puñetazo: http://www.youtube.com/watch?v=y_t1EPlaApU Algunos chavales nórdicos estaban perfectamente organizados y levantaban el brazo lanzando consignas ultraderechistas.
La policía dejo actuar impunemente a todos estos provocadores, y en muchos casos ni siquiera se interpuso; yo estaba estupefacto. He estado en cientos de manifestaciones, algunas bastante tensas, pero no había visto nunca algo como eso, una contra-manifestación permitida y sin ningún cordón policial en la mayoría de los casos. Creo que hubo muchos más ejemplos de civismo de los que alguna prensa nos quiere mostrar. Y de nuevo, una sospechosa dejadez de las fuerzas de orden público, que en otras ocasiones se emplean con toda su contundencia.
En todo caso, considero fundamental que redoblemos los esfuerzos por canalizar todas las acciones hacia un contexto pacífico, y evitar cualquier insulto o amenaza; e incluso tender una mano a quienes nos provocan. Creo que es la única estrategia válida en estos momentos, y además va en nuestro ‘sello de identidad’ como cristianos.

– La noche terminó para mí de una forma bastante surrealista, presenciando en primera línea la actuación policial en Sol, y tratando de aportar información a la prensa que quedaba por allí. La propia policía anduvo poniendo obstáculos e incluso acosando a la prensa. No pude ver en persona algunos episodios de violencia policial que después he podido contemplar gracias a twitter y a algunos vídeos.

– EN RESUMEN: pienso que la sociedad está entrando en una nueva fase; la crisis se está acelerando, y con ello las tensiones sociales. La sociedad se está polarizando, y Redes Cristianas ha tomado partido. En este nuevo ciclo social hay que repensar las formas de actuar, y sobre todo hay que conocer muy bien a nuestro ‘enemigo’ (Jesús dijo ‘amad a vuestros enemigos’, no dijo que no tuviésemos enemigos), saber cómo piensa y prever qué es lo que va a hacer.
Estamos regresando a velocidad de vértigo a formas de represión que no se veían desde el franquismo, (podéis leer esto: http://danielnuevo.com/blog/solo-por-informar/, en la primera línea hay un link a un vídeo).
No podemos comportarnos con ingenuidad en estos tiempos que vienen, y debemos tener la lucidez y astucia necesaria para ir viendo los pasos a dar para colaborar a que surja un mundo más humano.