Cádiz, a 17 de julio de 2009
El Secretariado diocesano de Pastoral Obrera de la diócesis de Cádiz y Ceuta, quiere manifestar su apoyo y solidaridad con los parados que, desde el 1 de junio de 2009 se manifiestan en la Pza. de San Juan de Dios, y que desde el 8 de junio se encuentran encerrados en la Iglesia de Santo Domingo de Cádiz, en señal de protesta por la falta de respuesta del Ayuntamiento y la Delegación provincial de Trabajo de la Junta de Andalucía a su reivindicación de tener un puesto de trabajo que les permita a ellos y a sus familias vivir dignamente.
El Secretariado diocesano de P.O. los anima, además, a que sigan unidos como hasta ahora, y esperanzados, por tanto, de que sólo con la unidad de acción podrán conseguir que las autoridades se tomen en serio la necesidad que tienen de trabajar.
Los trabajadores y trabajadoras que formamos este Secretariado de Pastoral Obrera pensamos que la situación de paro en que se encuentran, entre otros, estos ciudadanos es un grave atentado al orden constitucional en cuya Ley Fundamental, artículo 35 se proclama el deber y el derecho de todos los ciudadanos y ciudadanas españoles al trabajo. Atenta también a la estabilidad democrática de nuestra sociedad, pues genera descontentos y movilizaciones, que pueden terminar en una gran frustración si no son satisfechos. Altera la vida normal de las familias, provocando no pocos problemas socioeconómicos y patologías, que afectan seriamente a los hijos, cuando los parados son padres y madres de familia. No podemos olvidar tampoco el desengaño y desilusión de tantos jóvenes desempleados, con proyectos de vida rotos y sin futuro.
De acuerdo con nuestra visión cristiana de la vida, pensamos que el trabajo es un bien que no se puede negar a nadie, salvo que se piense que los derechos de la persona están subordinados a los intereses del mercado, lo que sería una grave aberración. En consecuencia, recordamos a nuestros políticos la responsabilidad que han contraído con la ciudadanía y la importante obligación que tienen de atender sus problemas y darles solución.
Hacemos un llamamiento a todos los gaditanos y gaditanas para que visiten, apoyen y se solidaricen con los encerrados en Santo Domingo. Exigimos a los políticos con responsabilidades institucionales presionen y lleven a cabo las medidas que sean pertinentes a fin de proporcionar a estos trabajadores en paro un puesto de trabajo en condiciones dignas, aprovechando la oportunidad que brindan en estos momentos los planes E, Proteja y Menta, así como los promovidos por iniciativa municipal, aunque para ello sea preciso aplicar, de acuerdo con las leyes, y ante la falta de contratación en nuestra ciudad, la discriminación positiva a los trabajadores residentes en la capital, en la proporción y medida que no lesione la libertad de elección de aquellos que vienen a Cádiz a trabajar.
SECRETARIADO DIOCESANO DE PASTORAL OBRERA, DI?CESIS DE CÁDIZ Y CEUTA.