Fernando Karadima instruyó a obispos acusados por las víctimas de encubrir las violaciones desde hace 50 años
Los tribunales chilenos juzgan al sacerdote diocesano Fernando Karadima Fariña que ya fue condenado por el Vaticano como culpable del delito de abuso sexual y sicológico de menores el pasado mes de enero. El ex párroco de 80 años fue formador de más de cincuenta sacerdotes, entre ellos cinco obispos de la actual jerarquía eclesiástica que son, a su vez, acusados de encubrimiento por parte de las víctimas.
El sacerdote Fernando Karadima, acusado de violaciones a menores en Chile, está relacionado con conocidos políticos de la derecha chilena. Foto: El Ciudadano. La justicia chilena está juzgando al conocido sacerdote Fernando Karadima Fariña por abusos de menores, otro caso de violación a menores en el seno de la iglesia católica chilena que está convulsionando a este país.
En abril del año 2010, Karima Fariña, ex párroco de la Iglesia Sagrado Corazón de El Bosque, una de las más influyentes de la capital chilena en la década de los 80?, fue acusado de abuso sexual y sicológico por el médico James Hamilton, el periodista Juan Carlos Cruz, el filósofo José Andrés Murillo y el abogado Fernando Batlle. Todos ex miembros de Acción Católica, entidad de actividades pastorales que encabezaba Karadima, al que acusan de tocaciones en los genitales y otro tipo de actos sexuales. El sacerdote oficiaba como su confesor y director espiritual en los años 90? en la Iglesia de El Bosque, de esa forma lograba ?controlar sus mentes??, afirman.
El fallo del Vaticano a cargo de la Congregación para la Doctrina de la Fe pudo establecer la culpabilidad de Karadima tras ocho meses de investigación y condenó al sacerdote a ?vida de retiro, penitencia y oración??. La justicia chilena ha resulto reabrir la investigación del caso el pasado 15 de febrero, tras haber sobreseído la causa en diciembre de 2010 sin determinar culpabilidades. El Servicio Médico Legal declaró al sacerdote como imputable tras varias pericias sicológicas. La ministra en visita que lleva el caso, Jessica González, interrogó personalmente a Karadima durante tres horas y confirmó que será sometido a careos con las víctimas.
Los vínculos del padre Karadima
Muchos de los feligreses de la Iglesia de El Bosque pertenecen a familias importantes ligadas a políticos de la derecha y al poder empresarial. Entre ellos figura el alcalde Manuel José Ossandón, vicepresidente de Renovación Nacional -partido del Presidente Sebastián Piñera-, y Patricia y Eliodoro Matte, una de las familias más poderosas e influyentes del país. Patricia Matte preside la Sociedad de Instrucción Primara que posee una red de colegios, y Eliodoro Matte es presidente de las empresas CMPC, multinacional de la industria forestal y papelera. Este último, según revela la revista Qué Pasa, es uno de los siete empresarios que financió la defensa de Karadima, además, Eliodoro Matte sostuvo una reunión con el Fiscal Nacional Sabas Chaúan, para manifestarle su ?preocupación por el padre Karadima?? y solicitarle una ?investigación rápida??.
La influencia del sacerdote en la derecha conservadora nacional es patente a la hora de ver quiénes lo representan. El abogado defensor de Karadima ante el Tribunal Eclesiástico, Juan Pablo Bulnes Cerda es hermano de Juan Luís Bulnes Cerca, condenado como uno de los autores del asesinato del General Schneider, ex comandante en jefe del Ejército, ocurrido en 1970 tras ser electo presidente Salvador Allende. El periódico electrónico El Mostrador, cita un informe de la DINA, servicio de inteligencia durante la dictadura de Augusto Pinochet, en el que se afirma que Juan Luís Bulnes frecuentaba la parroquia de El Bosque junto a otros de los autores del asesinato y junto al propio Jaime Guzmán, fundador del partido Unión Demócrata Independiente de la coalición gobernante.
A la defensa de Karadima se han sumado recientemente los abogados Luís Arévalo y Luís Ortíz Quiroga, quienes ya habían defendido a otro párroco acusado de abuso sexual de menores, José Andrés Aguirre ?conocido como el ?cura Tato??-, que fue declarado culpable de abusos deshonestos reiterados y estupro a diez menores de edad, condenado a 12 años de cárcel.
El padre de James Hamilton, abogado del mismo nombre, sufrió un inesperado robo en su oficina, donde además de dinero sustrajeron pendrives y archivos, el afectado sospecha que buscaban información ?pero no había nada de interés??. Actualmente se investiga si el incidente tendría relación con el caso.
El silencio de la iglesia
Fernando Karadima guió a muchos jóvenes hacia la vocación sacerdotal y formó a cerca de cincuenta curas, entre ellos a cinco obispos de la actual jerarquía eclesiástica: Andrés Arteaga, Juan Barros, Tomislav Koljatic y Horacio Valenzuela. Los mencionados obispos fueron fieles defensores de la inocencia del sacerdote al hacerse públicas las acusaciones de abuso, sin embargo, tras conocer el fallo del Vaticano emitieron un comunicado reconociendo la veracidad de los hechos. En las declaraciones de James Hamilton, denunciante y víctima de Karadima, sostiene que los obispos ?estuvieron presentes, veían las mismas cosas, los besos y los toqueteos??.
Hamilton había denunciado estos actos ante el Arzobispado de Santiago en el año 2004 ?a cargo del Cardenal Francisco Javier Errázuriz en ese entonces-, sin embargo, sostiene que se negaron a investigar manteniendo a las víctimas ?en vilo durante cinco años??, tiempo en que prescribieron los delitos civiles del sacerdote. Hamilton calificó a Errázuriz de ?encubridor criminal?? en el programa Tolerancia Cero de Chilevisión por no haber tomado medidas en aquel momento. La Conferencia Episcopal chilena, en la voz del Arzobispo de Santiago monseñor Ricardo Ezzati, se ha reunido con las víctimas para manifestarle su pesar y ha declarado públicamente que tomarán medidas para ser más rigurosos