Estamos viendo cómo en la actualidad grupos de jóvenes de las dos etnias florecen en diferentes lugares, con acciones diferentes pero con un mismo objetivo: juntos, construir un país en paz, unido y desarrollado. Los que ayer eran enemigos, hoy hacen camino juntos; unos se dedican a desarrollar cooperativas de alimentos y cajas solidarias, otros van a limpiar el pueblo, plantar árboles y así van proliferando muchos encuentros de reflexión e intercambio.
Temas sobre salud, seguridad, educación, economía, cualquier realidad de su vida hace que vean la necesidad imperiosa de tomar en sus manos el futuro a rehacer.
En estas Asociaciones lo común es autofinanciarse, salir adelante como sea, aportando los medios a su alcance y sus capacidades personales para así construir el país que quieren.
Yvette Ihorimbere, estudiante de la facultad de derecho en Kiremba, en el sur de Burundi, es miembro de un consejo de juventud y, regularmente desde hace tres años, presentan a las autoridades informes sobre cosas a mejorar. Otros jóvenes participan en emisiones de televisión, escriben en la prensa que más se lee para expresar sus ideas y propiciar debates que propongan soluciones a sus problemas, así como concursos sobre la paz, la democracia, el buen gobierno, reformas de instituciones…
El Foro para la Conciencia y el Desarrollo creado hace unos pocos años por un grupo de estudiantes, cuenta con mil asociados, tiene una caja social para ayudar a los enfermos y una escuela secundaria en la capital, fundada en 2004, que ayuda a los mas desfavorecidos con los uniformes y materiales, y dan una formación en valores.
Queda un largo camino, pero algo nuevo está creciendo.
Aurore Muco. Info.cepac