Enviado a la página web de Redes Cristianas

Cada vez tengo peor opinión de mi mismo y del resto de mis congéneres. Los humanos somos capaces de lo peor y solo algunas veces de lo mejor. Hay ocasiones en las que somos malos por naturaleza, pero en no pocas lo somos por ignorancia.

Y por ignorancia -no encuentro otra razón- se manifiestan los que últimamente sufren alucinaciones conspiranoicas. Ya son bastantes y están esparcidos por el ancho mundo. Se manifiestan porque dicen que lo del virus es un cuento chino y, por tanto, el confinamiento y la mascarilla son atentados contra su libertad. Pero yo me pregunto: ¿pueden gozar de libertad los irresponsables?

Uno se complace al comprobar que el ser humano ha sido capaz de avances extraordinarios en todos los campos del saber, pero, cuando de pronto aparecen estos energúmenos manifestándose contra realidades palmarias, el desagrado, la tristeza y la desesperanza diluyen la fe en ese animal que llaman sapiens.

/ Antoñán del Valle ( León)