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Con el apoyo del grupo Stop Desahucios del 15M de Granada, David Cantos y Aurora Valero han conseguido librarse de la deuda que mantenían con Unicaja.
Cantos, electricista de 35 años, y Valero, limpiadora de 45, comenzaron a vivir juntos en Maracena en 2003, para lo que se hipotecaron con esta entidad. Nueve años después, en 2012, empezaron a tener problemas de pago de las cuotas de 580 euros mensuales. En marzo de ese año Cantos perdió la ayuda de desempleo. «Seguía llevando dinero al banco, no sabíamos que iba a fondo perdido», recuerda este vecino de Maracena.
La pareja intentó negociar sin éxito con Unicaja. Propusieron reestructurar la deuda, y a través de un abogado pidieron una carencia. La entidad no daba respuesta o, como mucho, respondía: «?se no es mi problema». Incluso «se rieron de Aurora al ir a pedir los papeles» que necesitaban, indica Cantos.
Por este motivo, Cantos y Valero acudieron a Stop Desahucios, en concreto a su asamblea de la Chana en diciembre de 2012. Acompañados por otros miembros del grupo, «ya no se reían, pusieron caras serias». Sin embargo, el problema siguió sin resolverse. La pareja siguió insistiendo, y una acción de Stop Desahucios aceleró el proceso, por lo que el banco finalmente aceptó la dación en pago de la vivienda y la condonación de la deuda, que acaba de ser rubricada oficialmente.
Ahora la pareja ya no vive junta, pues cada uno ha tenido que irse a vivir con su respectiva familia. Siguen participando en la lucha: «Somos dos y achuchamos, hay que apoyar moralmente», afirma Cantos, quien manifiesta que «vamos a arreglarlo todo porque si no, nos comen».