?Será la opinión pública y el escándalo público lo que ocasionará un cambio para cancelar la deuda?? (Kenneth Kaunda)
Montevideo, 14 de julio de 2010 ?
Lo único que convendría agregarle, es que hemos oídos discursos encendidos sobre la democratización que implica el futbol, que no une más allá de nuestros intereses de clase??
Sin embargo, en muchos países, en todo el mundial, la clases opresoras, no han cesado ni un segundo de apretar el cuello de los trabajadores, a tal punto que si repasamos el mundo, veremos como se levantan conflicto de los trabajadores pidiendo el respeto para su derechos fundamentales??y sin embargo las dinámicas capitalistas, siguen repitiendo, no a la intervención del Estado, si a la regulación del mercado??
Pero claro el mercado no sirve cuando el pueblo desde su bolsillo, a través de los fondos públicos tiene que salir a cubrir las ineficiencias de los sectores privados, tanto de las grandes empresas productivas, como de la especulación financiera??
Como en buena parte del mundo, se prepara, para hacer pagar a los trabajadores, con ajuste??la receta preferida de los organismos multilaterales de crédito??la deuda que contrajeron los estados al transferir millonarios fondo, para cubrir las perdidas de la gran banca??
Mientras tanto, las multitudes aplauden y se desgañitan por la pasión del futbol, pensándose muchos que hoy son campeones mundiales, mañana al ir a la compra, se dará cuenta que su sueldo ha bajado su poder adquisitivo y que a este ritmo de inflación en el mundo, el proceso de disminución de ese poder adquisitivo, se ira acentuando y nadie sabe ni como ni cuando se detendrá, a pesar de los anuncios oficiales de todos los gobiernos, de que el 2011, habrá crecimiento, claro, que no dice para quienes, posiblemente constatemos llegado el momento, que no será para los trabajadores??Todo esto mientras todas las clases se abrazan festejando el triunfo??
Mientras todos se abrazan, festejando los triunfos, la deuda publica crece, y la calidad de vida de los trabajadores disminuye??Si la energía y movilización social que ha desencadenado el futbol y el mundial, se emplearán para cambiar el rumbo de la historia, seguramente lo habríamos logrado.-
(Información recibida de la Red Mundial de Comunidades Eclesiales de Base)