Cientos de salvadoreños protagonizaron hoy una procesión en esta capital para conmemorar el 28 aniversario del asesinato de Monseñor Oscar Arnulfo Romero. El prelado fue asesinado por un francotirador de los escuadrones de la muerte, por orden del fallecido mayor Roberto D’Aubuisson, autor intelectual del crimen, según reconoció la Comisión de la Verdad de la Organización de Naciones Unidas.
Esta comisión, creada a raíz de los Acuerdos de Paz que pusieron fin en 1992 a más de 10 años de guerra en El Salvador, se encargó de investigar los crímenes de lesa humanidad cometidos durante el conflicto armado. En la mañana de este lunes, después de una misa oficiada por varios sacerdotes, la procesión se encaminó hacia la capilla del hospital La Divina Providencia, en el noroeste de esta capital, donde fue asesinado el arzobispo de un disparo al corazón.
La peregrinación detuvo su marcha en el monumento a las víctimas de la guerra civil salvadoreña antes de culminar en la cripta de la catedral de San Salvador donde están los restos de Romero. En todo el trayecto cientos de policías vigilaron la procesión. ?La voz de los sin voz?? como le llamaban los feligreses y le continúa llamando gran parte de los salvadoreños, tenía vocación especial para denunciar la injusticia social y la represión militar que cada vez se agudizaban más en esta nación centroamericana.