POR UNA IGLESIA CRÍTICA, ABIERTA Y ACOGEDORA. Asociación Cultural Karl Rahner

0
91

Alandar

Del Servicio de Orientación y Acogida Universitario a la Asociación Cultural Karl Rahner. Así podría titularse el camino recorrido por un grupo de laicos que no nos resignamos al proceso de progresiva irrelevancia cultural en el que se halla inmerso el cristianismo en Europa en estos momentos. En el año 1981 surge el Servicio de Orientación y Acogida (SOA) como una iniciativa impulsada por Carlos García Hirschfeld S.J., Lolín Álvarez, religiosa de Jesús-María y un grupo de universitarios preocupados por cómo ser cristianos en la Universidad y universitarios en la Iglesia.

Un espacio para preguntarse con otros sobre lo que significaba ser cristiano y ser universitario, atento a las necesidades y ritmos de las personas, y en un clima de diálogo fe-cultura-justicia, donde se buscaba dialogar con la increencia y con el increyente que llevamos dentro. Un lugar pensado para el encuentro con otros y el acompañamiento, donde el único requisito era el respeto, la tolerancia, el espíritu crítico y en términos de Ignacio de Loyola, ?un grande ánimo e liberalidad?? para acoger las grandes preguntas de la Humanidad desde que el mundo es mundo.

En 2006, con motivo del 25 aniversario del SOA, celebramos un encuentro para dar un nuevo impulso al proyecto de 1981, porque, las personas y los contextos culturales cambian, pero las grandes preguntas permanecen, aunque se formulen de manera distinta. Por ese motivo, cansados del pobre papel en el que muchas veces se sitúa o se le sitúa a la Iglesia en el mundo en el que estamos inmersos decidimos que ese bagaje debía tener su lugar y su voz en la plaza pública, laica, cosmopolita y global. Debía trascender los muros de lo eclesial y permitir que otros pudieran identificarse con un cristianismo crítico, ilustrado y ciudadano, abierto al mundo y no atrincherado en posiciones con mucho pasado, pobre presente y escaso futuro. Pensamos y sentimos que tenemos cosas que decir. Nos duele que desde fuera, por ?méritos?? propios, la Iglesia sea percibida como una institución temerosa y anquilosada, con respuestas de ayer a problemas de hoy, de posiciones excluyentes, aliada con la derecha política, celosa guardadora de dogmas, regañona y vigilante de preceptos morales rígidos. Nos duele que desde dentro la Iglesia ?centrifugue?? a tantos cristianos que querrían seguir siéndolo. En definitiva, ?nos duele la Iglesia?? porque parece que cada vez pesan más esos aspectos que los genuinamente evangélicos.

Ser levadura

Defendemos una Iglesia acogedora, crítica desde el Evangelio, colegial y en abierto diálogo con el mundo. Con unas estructuras al servicio de las personas, útiles, ágiles, eficaces, participativas y democráticas. Para eso nos preguntamos qué podemos aportar los cristianos a la cultura y al debate público actual. Creemos que no se trata de hacer pasar por el aro de una ética teológica a la sociedad civil, se trata más bien de ?ser levadura??, el Evangelio no habla de imposiciones, pero sí de influir, de posicionarse.

En primer lugar queremos realizar una apuesta por ?los últimos?? que es ajena a la racionalidad económica y, con mucha frecuencia, política y social en la que vivimos. Deberíamos ser capaces de generar nuevas actitudes, y nuevas prácticas en ese sentido. ?Los últimos?? como lugar hermenéutico desde el que contemplar la vida y el mundo. Sin esta apuesta sería imposible entender la posibilidad de un cristianismo encarnado.

En segundo lugar queremos contribuir a crear una ética civil laica asentada en valores comunes teniendo como pilares la defensa los derechos humanos en especial de los más desfavorecidos, la democracia, la búsqueda de un orden internacional justo y el apoyo a políticas audaces de solidaridad. Una ética discursiva donde se busque siempre el mejor argumento desde el debate y el consenso, y que sea capaz de fomentar las virtudes públicas y de cuidar las fuentes de los valores.

En tercer lugar, un nuevo concepto de razón y de identidad del ser humano, una racionalidad abierta al espíritu y la corporalidad, al diálogo con otros y a la experiencia religiosa genuina, crítica de todo aquello que esclaviza al ser humano. Una razón consciente de sus limitaciones y por tanto en autocrítica, y un concepto de persona que es mucho más que razón racionalista. En cuestiones bioéticas y de moral personal deberíamos liderar el discurso y no intentar controlarlo o frenarlo. Proponemos una visión del ser humano como un ser en camino, abierto a la trascendencia, en equilibrio con otros y con la Naturaleza.

En cuarto lugar, nos sentimos capaces de fomentar actitudes de una ?reconciliación?? que sea capaz de acercarnos a la paz y de recuperar un mundo roto y de personas rotas, una ecología de la paz en solidaridad con la tierra y las generaciones futuras.

Por último, queremos ayudar a que el hombre de hoy siga invitado a hacerse la pregunta que Jesucristo propuso a los suyos: ?Y vosotros, ¿quién creéis que soy yo???. A todo esto y mucho más, os quiere convocar la Asociación Cultural Karl Rahner.

Para más información:
Asociación Cultural Karl Rahner – Asociación Civil
Sede: Calle Elvira 65, Granada
e-mail: rahner@gmail.com