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¡Feliz Navidad y Año Nuevo a obispos y presbíteros célibes y casados!
Con este pregón, escrito para la celebración cristiana de la Navidad, quiero felicitar a los amigos, a los lectores del Blog, a toda la parroquia de Religión Digital. A todos os deseo salud, buen ánimo, mejor espíritu-amor. Que el nuevo año os siga siendo oportunidad (?kairós??) para mejorar nuestro mundo.
Especialmente manifiesto mis deseos a los hermanos obispos y presbíteros casados
Os invito a ?avivar el carisma de Dios, que está en vosotros por la imposición de las manos; pues Dios no nos dio espíritu de cobardía, sino de valentía, de amor (?agápes??) y de dominio de sí mismo?? (2Tim 1, 6). ?Valentía, amor, señorío sobre sí mismo?? son frutos del Espíritu, adecuados para presidir y animar las comunidades cristianas. El encargo pastoral -simbolizado en la imposición de las manos- no incluye celibato ni matrimonio, ni distinción de género -Gál 3, 28: ?en Cristo todos somos uno??-.
La ley humana no puede (no debería) impedir el ejercicio del carisma divino
Habría que decir a la autoridad eclesial aquello que Pedro dijo a la autoridad de la sinagoga: ?juzgad si es justo ante Dios haceros más caso a vosotros que a Dios, pues nosotros no podemos no hablar lo que hemos visto y oído?? (He 4, 19-20). ¡Cuantos carismas impedidos por el clericalismo!
Las comunidades cristianas tienen derecho a escuchar ?lo que habéis visto y oído??
Vuestra experiencia cristiana, vuestro carisma, acreditado por muchos testigos, no debéis esconderlo bajo el celemín, sino ponerlo en el candelabro para que alumbre a toda la casa-iglesia (Mt 5, 15). Inventad, ?haced bulla?? (expresión corriente del papa Francisco para incitar a la acción), no os quedéis ?plantados mirando al cielo?? (He 1, 11). Hay que dar pasos. ASCE y MOCEOP deben hablar, respetar lo común y lo diferente, proponer actividades significativas conjuntas. José Mª Lorenzo y Tere Cortés, coordinadores durante años de estas dos asociaciones de sacerdotes casados españoles, pueden verse y organizar un encuentro fructífero y presentar sus expectativas actuales. Sus caminos plurales pueden converger en objetivos comunes. El pluralismo eclesial tienen su reflejo también en el ministerio.
Llamada a los más jóvenes, a los Movimiento apostólicos más dinámicos…
Este problema perpetúa la historia de mucho sufrimiento: represión enfermiza, exilio de hermanos, dobles y rotas vidas, mujeres invisibles, hijos vergonzantes… Jesús claramente no quiso esta ley. Fue introducida por la autoridad eclesial inútilmente: sus beneficios ya estaban en el celibato opcional. Sus macabros frutos siguen constantes, en toda época y país. No se da salida evangélica a quien no puede moralmente con el celibato, pero siente vocación ministerial. El celibato es culpable de que muchos no se planteen la vocación ministerial, o, una vez iniciada, terminen diciendo no a la llamada. La vocación sigue viva, pero la autoridad eclesial la sofoca. Es el clericalismo ya denunciado por Jesús: ?¡Ay de vosotros, expertos en la ley, porque os habéis hecho con la llave de la ciencia! Vosotros no entrasteis, y a los que querían entrar se lo prohibisteis?? (Lc 11, 52 Si el clero alto tuviera el Espíritu de Jesús, hace años que este problema se habría solucionado evangélicamente.
Las comunidades cristianas deberían ser más activas en este asunto
Obispos y presbíteros célibes deberían concienciar a sus comunidades sobre el celibato opcional. La ley no puede sofocar al Espíritu. ?La Iglesia la impuso por razones que nada tienen que ver con la fe cristiana. El motivo fue la idea pagana según la cual la vida conyugal impurifica para acercarse a lo sagrado. Eso ya nadie lo defiende hoy… Si, por otra parte, vemos que se trata de una ley que hace mucho daño, ¿con qué argumentos se sigue manteniendo? Hay que tener la libertad y el coraje de pedir insistentemente a las autoridades de la Iglesia que supriman esa ley?? (J. M. Castillo: ?Acabar ya con la ley del celibato?? 15.03.10. Teología sin censura).
Invito a todos a orar por este problema de nuestra Iglesia
El respeto a los carismas del Espíritu debía ser estímulo suficiente para que cualquier comunidad cristiana -parroquia, religiosos y religiosas, comunidades populares, conventos de clausura, cursillos, movimientos apostólicos…- orase y pidiera solución evangélica a este problema. La reducción obligatoria al estado laical no es solución evangélica para quienes moralmente no pueden seguir en celibato y quieren ejercer el ministerio acreditado. Desde el Evangelio de Jesús no tiene sentido vincular obligatoriamente celibato y ministerio sacerdotal. Es una asignatura pendiente que nuestra Iglesia debe superar. Todos podemos trabajar para que las cosas cambien. ¡Ánimo! ¡Es Navidad!
PREG?N DE NAVIDAD 2016
Hoy, Navidad de Jesús de Nazaret, os invito, hermanos(as), a
preguntar a vuestro corazón:
¿quién nació para mí hoy?
– ¿un hombre bueno, amigo de los más desgraciados?;
– ¿un trabajador por la igualdad y la vida de todo ser humano?;
– ¿un profeta de la bondad original del mundo?;
– ¿el Hijo del Misterio más hondo de la vida?…
Nosotros celebramos su memoria, diciendo:
?hoy ha aparecido la Bondad de Dios y su Amor al hombre??.
Pero ni siquiera sabemos quién es Dios:
– ?A la divinidad nadie la ha visto nunca??.
Lo único que tenemos todos es la vida, la realidad de las cosas:
– la vida que quiere saber y vivir en plenitud;
– la vida que desea realizarse en toda persona;
– la vida que busca libertad, sentido, alegría, paz…
Jesús dice traernos vida en plenitud:
de su experiencia del Misterio-Dios nace su proyecto de vida;
dice que ?trae la salvación -realización- para todos los seres humanos??;
– ?lo hemos oído, dirán quienes que le conocieron históricamente;
– lo han visto nuestros ojos;
– lo contemplamos y lo palparon nuestras manos acerca de la Palabra, que es la vida;
– porque la vida se ha manifestado, la hemos visto, damos testimonio;
– y os anunciamos la vida definitiva, la que se dirigía al Padre,
y se ha manifestado a nosotros.
– Eso que hemos visto y oído os lo anunciamos también a vosotros,
para que lo compartáis con nosotros;
y nuestro compartir lo es con el Padre y con su Hijo, Jesús Mesías?? (1Jn 1, 1-4).
Jesús ha suprimido el miedo a los dioses:
su ?Dios?? es padre-madre de vida en libertad y en amor;
su ?Dios?? es amor sin límites, comunión con todos;
su ?Dios?? no castiga, ni juzga, ni condena;
su ?Dios?? sólo ama, comprende, ilumina, perdona, libera…;
su ?Dios?? tiene la casa abierta para el abrazo y la fiesta;
su ?Dios?? quiere la humanidad del Hijo:
– que nace en los márgenes de nuestro mundo;
– que desde los más abandonados invita a humanizarnos;
– que, hablando con todos, pretende vida, alegría, paz, honradez, mesa compartida;
– que supera toda religión con la fraternidad universal (Mt 25, 31-46);
– que quiso prolongar su presencia en la mesa compartida, en el amor a todos…
Jesús nos ha abierto un camino de vida para todos:
nos ha entregado el Espíritu que animaba su vida;
– el Espíritu de amor gratuito e incondicional;
– el Espíritu que desea salud, pan, agua, cultura…;
– el Espíritu que cuida a los que menos vida tienen;
– el Espíritu que trabaja para que todos vivan en paz;
– el Espíritu que nos lleva a ser dueños de nosotros mismos;
– el Espíritu que nos hace leales y honrados;
– el Espíritu que respeta la libertad humanizadora…
Hoy (esta noche) es un día (una noche) luminoso (a):
celebramos el nacimiento de la Vida verdadera;
celebramos el nacimiento de la Estrella que brilla sin cesar;
celebramos el nacimiento de la Fuente que sólo mana amor a todos;
celebramos el nacimiento del Camino que termina en la vida plenamente dichosa.
Hoy (esta noche) es un día (una noche) especialmente gracioso (a):
lleno (a) de gracia, que ?sobreabunda?? y ?se desborda??;
?rebosando agradecimiento?? por todo lo que Jesús nos trae (Rm 5, 2; Ef 2, 7; 1, 8; Col 2,7).
Esto quiere ser la Eucaristía que ahora celebramos:
agradecer al Padre su Bondad y su Amor realizados en su Hijo Jesús;
agradecer a todas las personas la Bondad y el Amor que tienen;
decirnos unos a otros que estamos llamados a ser reflejos del Dios nunca visto;
tomar la decisión de ser otros Jesús, viviendo como él vivía.
¡Feliz Navidad!