Moceop se suma a los muchos comunicados de colectivos cristianos de base , teólogos y ciudadanos en general, que ven la visita del Papa a Valencia con un sentido crítico más que justificado.
Ante todo, sentimos el trágico accidente ocurrido en la ciudad que en breves días visitará Benito XVI y que ha ocasionado la muerte y graves accidentes a numerosísimas personas.
Desde aquí nuestro profundo dolor y sentimiento a los familiares y amigos de tantas víctimas.
No estamos en contra de que el Obispo de Roma, el Vicario de Cristo visite a las iglesias de todo el mundo. Lo que nos duele es que sea recibido por todas las autoridades como Jefe del Vaticano, un Estado anacrónico y antievangélico, con un despliegue de medios y un derroche de gastos que es incompatible con la sencillez que debiera tener quien actúa en nombre de Cristo . Según algunas fuentes, entre 7.000 y 10.000 millones de las antiguas pesetas puede ser el dinero invertido para recibir al Papa. Un gasto absolutamente escandaloso cuando existen tantos empobrecidos y tantísimos problemas sociales por resolver.
El Papa viene a Valencia al Encuentro Internacional de las Familias. Pero mucho nos tememos que será una vez más para afianzar un único concepto de familia : la familia tradicional católica y no todas las formas de familias que hoy se dan en nuestra Sociedad : familias de homosexuales, de divorciados vueltos a casar, de sacerdotes casados con sus familias. También en estas formas de familia existe el amor. También estas nuevas formas de familia deben ser apoyadas y alentadas porque ?donde está el amor, allí está Dios??
Desearíamos que en esta visita Benito XVI les hiciera ver a nuestros obispos españoles que no pueden estar identificados políticamente con ninguna opción ni hacer seguidismo una y otra vez del partido conservador. Que debieran mantenerse al margen de las confrontaciones políticas, ya que son estas cosas las que hacen que la Iglesia pierda credibilidad ante los ciudadanos y provoca la lejanía de muchísimos creyentes. Y que, como ya hizo recientemente en su viaje a otro país europeo, debiera empezar por poner orden en la emisora de radio de los obispos para acabar con tantos insultos y descalificaciones.
Esperemos que esta visita sirva para reconocer a todos los sectores de la Iglesia Española y no sólo para afianzar las posturas de los más tradicionales, sino también para reconocer y apoyar a quienes debemos criticar con frecuencia todo aquello que no nos parece evangélico en la forma de proceder de nuestros pastores, de la Curia Romana o del mismo Papa.
Desearíamos que Benito XVI tome conciencia de los graves problemas sociales de nuestro país : paro, marginación, acceso a la vivienda y al primer empleo especialmente para los jóvenes, los problemas de los inmigrantes, los derivados del terrorismo y de la violencia que se deben solucionar apoyando todas las iniciativas que sean válidas para terminar definitivamente con este problema. Que denuncie públicamente los problemas derivados de un Orden Económico Internacional injusto, que aumenta cada vez más el abismo entre países ricos y pobres, el terrible drama del pueblo palestino, el del pueblo de Irak y el de otros muchos países del Tercer Mundo.
Por último, esta visita debiera servir para que Benito XVI se abriera a los nuevos problemas del Mundo en el siglo XXI y apostara por una Iglesia más comprometida con las causas de los pobres, más abierta en temas de moral, sobre todo en relación con el uso del preservativo en países afectados por la pandemia del sida. Que sea acogedora con los divorciados vueltos a casar para que puedan seguir participando en la comunión. Que levante las censuras y castigos para todos los teólogos más abiertos. Que dé mayor protagonismo a la mujer en la Iglesia, con posibilidad de llegar a ejercer el sacerdocio. Que cambie la actual normativa que no permite el celibato opcional para los sacerdotes, religiosos y religiosas y en general apostando por una Iglesia abierta al Mundo y no cerrada en sí misma, capaz de atender la problemática del hombre de hoy y no repitiendo conceptos desfasados que responden a otras épocas.
Sólo así , la Iglesia dejaría de ser una de las instituciones menos valoradas por los ciudadanos como lo reflejan los últimos estudios sociológicos publicados ,especialmente entre nuestros jóvenes, que se alejan cada vez más de seguir lo que dicen los obispos.
EQUIPO DE PRENSA DE MOCEOP:
Juan Cejudo.- Cádiz
Andrés Muñoz.-Madrid
Teresa Cortés.-Madrid
Ramón Alario. Guadalajara