Resido en un barrio de Valladolid y trabajo en una asociación para ayuda a la integración de inmigrantes, pertenezco a la AA Vecinal de mi barrio… y soy Auxiliadora y vivo en comunidad. Soy solamente una cristiana que aún tiene el valor de SOÑAR con otro mundo y otra iglesia.
 
1ª ¿Te identificas (te sientes a gusto) con las posturas que está tomando actualmente la iglesia jerárquica española (hacia dentro y hacia fuera de sí misma) o, por el contrario, tienes dificultades? Si fuera esto último, ¿por qué?

Para nada me siento cómoda con la actitud de la Iglesia jerárquica. Algunas cuestiones que me brotan sin hacer una reflexión exhaustiva:

Hacen una lectura de la realidad social “ignorando” las graves situaciones económicas que padecen muchas familias y colectivos sociales. Ignorando que la misión de los hijos e hijas de Dios es SER buena para todos aquí y más allá de nuestras fronteras, que la pobreza no es buena para nadie, mientras ellos promocionan beatificaciones y grandes encuentros con unos costos que casi prefiero no conocer.

Me siento fuertemente excluida por el hecho de ser mujer, donde mi palabra es no se escucha, porque no interesa…

No entienden que la familia es algo más que papa, mama e hijos.

Una fuerte involución que se observa con solo ver la liturgia y celebraciones de los sacerdotes más jóvenes, obispos… (mucho brillo en los altares e iglesias, ritualesmrígidos, poco participativos, homilías piadosas y poco comprometedoras…), creo que confunden piedad y culto con espiritualidad…

La gran dificultad de muchos cristianos (sacerdotes y religiosos incluidos) para hacer pública su reflexión teológica (Pagola, por ejemplo), para ejercer algo tan evangélico como la corrección fraterna (Arregui)

… y podría seguir, pero no quiero, ya que solo pensarlo me duele en el alma, pido permiso para soñar con “otra iglesia” más de Dios, más de hermanos y hermanas.

2ª ¿Cómo crees que podría ser y te gustaría que de hecho fuera la Iglesia en España?

Una Iglesia más misericordiosa, más fraterna, donde habría sitio también para los pobres y las mujeres. Mas solidaria, más justa… más apostólica… más femenina… más esperanzadora… más creible…

Menos jerárquica, menos represora, menos “brillante”, menos rica, menos poseedora de la verdad, menos cultual, menos excluyente, menos…
Para ello no le falta donde mirar, en nuestra Iglesia ha habido y hay verdaderos testigos, modelos evangélicos…