El blog de Juan José Tamayo
En el quinto aniversario de su muerte
Pedro Casaldáliga fue más allá y antepuso las causas humanitarias a su propia vida. “Mis causas son más importantes que mi vida”, acostumbraba a decir»
«Sus causas nada tenían que ver con asuntos eclesiásticos de miradas estrechas, como la crisis de sacerdotes, mantener el estatus clerical, preocuparse por la enseñanza de la religión católica en la escuela, mandar al infierno a las mujeres pobres que interrumpían el embarazo, calificar a las personas homosexuales de enfermas…» Ver noticia original en …