Israel ¿impune? -- Luis Linares Zapata

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Enviado a la página web de Redes Cristianas

Fuente: Observatorio eclesial
Nada parece detenerlos. Por el contrario, encumbrados
dirigentes suyos ?Yoav Gallant y Giora Eiland? presu-
men su arrojo y voluntad genocida de ir hasta las últi-
mas consecuencias con sus bombas tontas y bloqueos
precisos. Ambas realidades llevadas hasta el extremo:
intensos bombardeos indiscriminados, incluyendo es-
cuelas y hospitales, así como cerrar llaves de alimen-
tos, agua, gas y medicinas.

La perfecta y criminal fórmula para causar severos da-
ños a una población, casi inerme, encerrada en un
apretujado gueto de concepción y diseño de esa mayo-
ritaria, supremacista, militarizada y colonialista mente
israelí ya bien documentada.

Su presumida prepotencia ante la crítica opinión mun-
dial deviene de la constante, totalitaria y tramposa co-
bertura que le presta EU. Una constante política que
pretende usar a Israel como subrogada plataforma de
fuerza ante las naciones de Medio Oriente. Al fortalecer
la capacidad destructiva del ejército israelí, se imponen
también los intereses de dominio estadunidenses.

Por ello los apoyos fluyen en los órdenes necesarios
para cimentar tal capacidad, disuasiva y ejemplar, en su
determinación guerrera. Una cobertura que mucho le
está costando al mando político y hasta al pueblo esta-
dunidense. Con amplia seguridad, algo de ello se habrá
de reflejar en los votantes respecto a las pretensiones
de Joe Biden por relegirse.

Los cambios de realidades y conciencia en el mundo es
un reciente, pero acelerado, fenómeno geopolítico. El
sur global es una más de las consecuencias derivadas
de esos desplantes, soberbios y arbitrarios, de un impe-
rio que se sigue pensando hegemónico y que ya no lo
es.

De aquí que, la decisión del gobierno mexicano de en-
viar, junto con el de Chile, la petición a la Corte Interna-
cional de Justicia para que investiguen posibles críme-
nes en Gaza por Israel, sea, en efecto, un paso por
demás trascendente. Y lo es, en primer término, por
responder a motivaciones de profunda humanidad. Se
apoya tal compromiso en categorías morales y éticas
como sostenes legítimos. Además, subrayan una va-
liente, digna y realista postura de política externa.

El gobierno de México no quiere voltear hacia el infinito
y, mustiamente, ceder a temores por las múltiples y
ciertas presiones que habrán de seguir. Bien sabe el
presidente López Obrador del peso de las élites ?en
especial financieras? de muchos países que apoyan el
seudoderecho del Estado judío para defenderse. En-
tendiendo por ello, el desproporcionado ataque a los
palestinos como consecuencia directa.

Los objetivos que sus obcecados dirigentes han men-
cionado (destruir Hamas y rescatar prisioneros) no ca-
ben en la feroz enjundia de sus ataques a la población
civil. Ahí están las escalofriantes cifras y fundadas opi-
niones de una miríada de organismos internacionales
que dan cuenta de la catástrofe ocasionada.

Trátese de relatores de la ONU, o de su mismo secreta-
rio general, de la Unesco, de Médicos Sin Fronteras y
muchas organizaciones humanitarias, incluyendo de
civiles israelíes. Todas patentizando el genocidio en
marcha como tétrica verdad activa o, al menos, detener
la ofensiva en marcha.

La pretensión de expulsar a los palestinos de su tierra
es, abiertamente, la desmedida pretensión israelí. Su
premier así lo declara sin subterfugio. Israel quiere,
desde hace tiempo, adueñarse de todo el territorio, aho-
ra bajo su asedio y disputa. Razón por la cual no acep-
tan la creación de dos estados en esas tierras, a pesar
de la determinación de la ONU de 1948.

Hasta la misma creación de Hamas, impulsada y soste-
nida durante años por Israel, tuvo ese propósito. Crucial
información que fue revelada por el comisionado euro-
peo para las relaciones externas de la Unión Europea ?
Josep Borrell?. Fue, qué duda, una estrategia divisio-
nista para mermar a la Autoridad Nacional Palestina (Al
Fatah) ahora asentada en Cisjordania. Que hasta le tie-
nen congelados los fondos fiscales que le pertenecen,
pues los cobra Israel.

Se acumulan denuncias ante cortes internacionales por
los agravios israelíes. En estos días, Borrell mismo pre-
sentó un plan integral de paz que cita a la acción, in-
mediata y combinada, de varios países. Tanto Bélgica
como España lo impulsan, aun cuando hay notables
disparidades en el seno de la comunidad europea.

Las decisiones tanto de Sudáfrica, como de México y
Chile, deben reconocerse en medio de los temores,
enojos, reclamos y la indiferencia de otras muchas na-
ciones. En particular hay que apuntar a las de árabes
creyentes que callan y quieren pasar la ignominiosa
página. Mientras, los riesgos ciertos de una generaliza-
ción del conflicto se acrecientan.

(jornada.com.mx) 24/01/2024