Religión Digital A la vista del primer año de Pontificado de Benedicto XVI, el teólogo disidente Hans Küng ve muchos «signos de esperanza» en el rumbo que marca su antiguo compañero de claustro académico en la Universidad de Tubinga. |
El comentario resulta doblemente valioso por venir de un teólogo que ha hecho bandera de sus críticas al Papa y por haber sido realizado en un extenso artículo distribuido por «The New York Times». Küng confirma su preferencia por «un Papa pastor orientado hacia el ecumenismo. Y aquí veo signos de esperanza. El nuevo Papa es un estudioso serio y reflexivo, que no está siempre ocupado con grandes apariciones en público».
Según el teólogo suizo obligado en 1979 por el Vaticano a dejar la cátedra de Teología Católica en la Universidad de Tubinga, donde continuó como catedrático de Teología Ecuménica, Benedicto XVI «es un pastor supremo que avanza con pasos más lentos y más breves, que se toma su tiempo y que prefiere realizar cambios pequeños que provocan después otros más grandes. Los breves debates libres en el último Sínodo y en el encuentro con los cardenales suponen un comienzo de colegialidad».
Küng recuerda que durante su encuentro con el Papa en Castelgandolfo el pasado verano, «hablamos del diálogo interreligioso, y Benedicto XVI se manifestó varias veces contra la idea del «choque de civilizaciones»». Por otra parte, está convencido de que «no habrá paz entre las naciones sin paz entre las religiones, y que la paz no se hace sin el diálogo».