Estamos en el tiempo de decidir entre la guerra y la paz… -- Gabriel Sánchez (Montevideo-Uruguay)

0
51

El mandatario peruano, sin embargo, omitió señalar las causas de esta carrera armamentista, quien promueve la guerra y los países que se benefician de la venta de armamento. El gasto militar de Estados Unidos en 2007 fue de 716.400 millones, en su delirio de imponer su hegemonía en el mundo y de controlar los flujos de petróleo, minerales y agua y la biodiversidad, Estados Unidos tiene 865 bases militares en 46 países que albergan a más de 190.000 soldados.

Estados Unidos es un país en guerra, participa con efectivos y armamento en las guerras de Irak y Afganistán y mantiene un sinnúmero de frentes abiertos en África y Asia en la llamada ?guerra global contra el terrorismo??. En América Latina tiene en bases e instalaciones militares en El Salvador (Comalapa), Honduras (Soto Cano), Puerto Rico, Cuba (Guantánamo), Aruba, Curazao, Perú (Iquitos y Nanay), Paraguay (Estigarribia) y ahora ha convertido a Colombia en una gran base militar proyectando utilizar al menos cinco bases aéreas y dos puertos. Interviene directamente en el conflicto colombiano con ayuda militar (la tercera en el mundo, luego de Israel y Egipto), asistencia tecnológica, militares y mercenarios.

Desde que se instalaron gobiernos de izquierda en América Latina, ha desplegado la Cuarta Flota que estaba inactiva desde finales de la segunda guerra mundial. Estados Unidos tiene, entre sus objetivos, apoderarse del petróleo de Venezuela (que tiene una de las mayores reservas del mundo) y controlar la Amazonía, la mayor reserva de agua dulce y biodiversidad del mundo.

Al hablar de armamentismo, la gran prensa señala a Venezuela, pero no dice nada de Colombia. Con 254 mil efectivos, el ejército colombiano es el segundo en América Latina solo superado por Brasil. Colombia destina el 4 por ciento del Producto Interno Bruto a gastos militares, el más alto de América Latina.

Venezuela, luego de que Estados Unidos le negara la provisión de repuestos para sus aviones y otros equipos militares, ha adquirido armas, aviones a Rusia y otros países, pero este equipamiento, según señaló el Vicepresidente de Venezuela Ramón Carrizalez, es de carácter defensivo, agregando que lo ?hemos tenido que adquirir como consecuencia de la amenaza que se ha instalado en la República de Colombia?? y ?para garantizar la integridad de nuestro territorio??. Carrizalez agregó que Venezuela tiene la ?decisión de proporcionar toda la información que le sea requerida por el Consejo de Defensa de UNASUR??. (Fragmento del artículo Colombia se niega a informar acuerdos con EE.UU. de Eduardo Tamayo)

http://alainet.org/active/33064

——————————————-
ESTAMOS EN EL TIEMPO DE DECIDIR ENTRE LA GUERRA Y LA PAZ??
Sólo hay una guerra que puede permitirse el ser humano: la guerra contra su extinción. Isaac Asimov

Montevideo, 17 de septiembre de 2009 ? Gabriel Sánchez

Si hay algo que resulta evidente, es que la actitud Colombo-estadounidense de enfrentar al resto de los países de Suramérica a la dinámica de decisiones tomadas, como la instalación de bases, con alta tecnología de ataque, que tendría la capacidad de transportar armamentos nucleares y que por lo tanto rompe drásticamente el equilibrio de fuerzas y sitúan a la región en una verdadera carrera armamentista, tiene su origen en la apetencia de Estados Unidos por los recursos naturales de esta zona del mundo, pero especialmente hay dos, con lo que ha tenido una indisimulado apetito, son el Amazonas y la enorme reserva de petróleo descubierta en Brasil, máxime cuando este, dando ?un mal ejemplo?? ha decisidido que el estados Brasilero sea quien la explote y lo haga mediante una alianza estratégica con China??

Incluso diríamos que a pesar de las ingentes inversiones de varias naciones, con especial énfasis la de Brasil, los ejércitos de los países Suramèricanos aún no tiene la capacidad de responder a un ataque??masivo desde Venezuela, con la tecnología que los estadounidenses pondrán en la zona??Y más allá de los vericuetos diplomáticos y de las idas y venidas en los organismos de integración regional?? Si se verifica la instalación de bases de esa envergadura, no le quedará, entendemos nosotros, otra salida a países como Brasil y Venezuela, que permitir que en su territorio se instalen bases similares del SCO (Organización de Cooperación de Shaghai), como única posible defensa real a una posible agresión desde Colombia??

La única carta que se puede poner sobre la mesa de negociación es que en las bases hayan personal militar de la UNASUR, cuestión que se ha reducido a alguna visita anual??Estimamos?? que cuando se evalué especialmente por los muy profesionales estrategas de los ejércitos de Brasil y Venezuela el riesgo real, no les quedará otra salida que recurrir a las otras potencias (China y Rusia), para salvaguardarse de una posible agresión??

Estamos a aún a tiempo de reformular el camino de establecer un dialogo que permita la cooperación y de evitar la instalación de bases ?extranjeras??, porque si se entra en la dinámica de una paz armada??poco a poco, la situación se nos ira saliendo de las manos a todos, este tiempo es el de la encrucijada, que pude decidir el futuro de toda la humanidad??si hacemos un esfuerzo por establecer la paz, estimo lo lograremos, pero si seguimos la dinámica de guerra??cualquier escenario es posible, incluso el de una confrontación con armas nucleares de las potencias y EE.UU. tiene claro que serán junto con Colombia Blancos estratégicos??

La responsabilidad la tiene Estados Unidos, que deberá tener la voluntad de dialogar, con los países de Suramérica y negociar instancias diferentes que puedan evitar que dichas bases se concreten, de lo contrario??habremos dado un gran paso, rumbo al abismo??

(Información recibida de la Red MUndial de Comunidades Eclesiales de Base)