“La alternativa es cambiar el sistema, no el clima. (Fragmento del comunicado de los pueblos indígenas del mundo ante el COP17)
Montevideo, 7 de diciembre de 2011 –
Mientras desde Brasil recibíamos esta noticia… “La deforestación en la Amazônia alcanzó los más pequeños niveles desde 1988. El área desmatada de agosto de 2010 a julio de 2011 fue de 6,2 mil Km² – 11,7% inferior a los 7 mil Km² registrado en el mismo periodo entre 2009-2010, de acuerdo con Prodes, sistema que monitorea anualmente el deforestamiento en áreas de hasta 6,25 hectáreas, del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe). Los números de este año revelan que Brasil cumple las metas de reducción del deforestación asumidas en la Conferencia del Clima, en Copenhagen, en 2009”*
Que en realidad no deja de ser una relativamente buena noticia, sin embargo, entendíamos que cara al problema de esta crisis que es un hidra con cinco cabezas, la primera la cultural, la climática, la política, la económica y la alimentaria…existe por lo menos tres miradas, dos de ellas no se asumen las causas profundas y reales de esta crisis climática, la primera es esta de Brasil, cuya mirada se centra en la disminución de la desforestación (que repetimos es una relativamente buena noticia) y no en la causa que hace que según sus propios números se desforeste 6200 kilómetros cuadrados anuales de la floresta amazónica, uno de los principales pulmones del planeta…
Existe una segunda mirada, que es la mercantil…como REDD+, es un sistema que intenta financiar esencialmente la no desforestación en los países en desarrollo a cambio de incentivos económicos, con una sinergia bursátil, las grandes multinacionales financian esta iniciativa en los países en desarrollo y a cambio obtienen una suerte de bonos, que le permite mantener e incluso aumentar sus emisiones, pagándolas con estos bonos, a esto se llama el mercado del carbono…Obviamente, esto ni ha bajado las emisiones y los técnicos en el tema, han anunciado que es una creación esperpéntica y peligrosa…Que llevaría a desmontar los esfuerzos reales por bajar las emisiones, con compromisos pautados en cantidad y fecha, para esto se debe salvaguardar el tratado de Kyoto y descartar el engaño que significa el REDD+ (REDUCCIÓN DE EMISIONES DE DEFORESTACIÓN Y DEGRADACIÓN DE BOSQUES), un mecanismo tan engañoso, como su nombre…
Y existe otra mirada a la que personalmente nos adscribimos fervorosamente…y que podemos resumir en una de las frases del comunicado de todos los pueblos indígenas del mundo ante el COP17… “La alternativa es cambiar el sistema, no el clima, apostando por un nuevo paradigma civilizatorio, por el Buen Vivir, en armonía entre los pueblos y la Madre Naturaleza.” **
Estas tres miradas no sólo obedecen a posicionamientos políticos, ideológicos o de intereses, hay detrás de esta mirada una concepción del hombre, de la creación y de la historia… “los pueblos indígenas hemos advertido que los cambios climáticos confirman el quiebre de la relación armónica entre los hombres y la Madre Tierra, poniendo en peligro el futuro de la humanidad… Es todo un modelo de civilización el que está en crisis, aquel que se inició hace 500 años con el saqueo de los bienes naturales para el enriquecimiento y la acumulación de capital”**
Hay aquí una definición más profunda y esencial que la de una ideología, estamos definiendo que somos y cuál es la naturaleza de nuestra relación con los otros seres de la naturaleza…estamos no decidiendo cuantas hectáreas menos hemos talado, ni cuando dinero fluirá a través de los mercados de carbono, estamos definiendo que somos…quienes somos, en tanto seres humanos, si formamos o no parte de las confluencias de la vida, expresadas en todo lo vivo de la creación, o si nos entendemos como aquellos que pueden manipular la creación (eso incluye a la humanidad), para satisfacer nuestra necesidad de ser más, poder más y tener más que los otros…Y en definitiva, en este pequeñísimo punto azul del Universo que es nuestro planeta, utilizaremos aquello que el universo nos ha hecho y regalado (para los creyentes como este modesto servidor Dios), para confluir con nuestros esfuerzos a fin de desplegar toda la belleza y la grandiosidad de la Vida, o para oponernos a ella y entonces, merecer el veredicto de extinción…
Lo que esta en juego en el COP17, no es una definición coyuntural de políticas ambientales y económicas conexas con el aspecto climático, sino asistimos a nuestro propio juicio como especie, en ella definiremos, el destino de buena parte de la vida en este planeta…como dicen las entrañables naciones ancestrales de la Madre Tierra…
Por esto, el comunicado de estos queridos hermanos indígenas, de todo el planeta, viene a ser una profecía, que quiere mostrarnos el único y verdadero camino para volver quinientos años sobre nuestros pasos y volver a ser parte de esta maravillosa comunidad que es la creación…Esto exige un cambio profundo que se verifica en lo esencial de nuestra humanidad y que implica un cambio civilizatorio…que cambia el acumular por el compartir, el retener por el donar, el poder por el servir…y fundamentalmente el respeto venerante por todos los seres de la creación…
Integraron el panel Grace Balawag, indígena de Filipinas; Berenice Sánchez, del pueblo Nahua de México y miembro de la Red de Mujeres Indígenas sobre Biodiversidad de América Latina y El Caribe (RMIB-LAC); Victoria Haraseb, indígena de Namibia perteneciente al Grupo de trabajo de las minorías indígenas de África Austral; Antonio Medina, indígena mazahua de México de la Red Indígena de Turismo de México (RITA), y Hortencia Hidalgo, aymara de Chile y activista de la Red de Mujeres Indígenas sobre Biodiversidad de América Latina y El Caribe (RMIB-LAC).
Declaración de los Pueblos Indígenas del Mundo ante la COP 17
Nosotros, los pueblos indígenas del mundo, unidos ante la urgencia de la crisis climática y frente a la falta de voluntad política de los Estados, principalmente de los mayores emisores de gases de efecto invernadero, demandamos la inmediata adopción de acuerdos vinculantes con responsabilidades diferenciadas pero compartidas, a fin de detener el calentamiento global y definir modelos alternativos de desarrollo en armonía con la Madre Tierra.
Desde hace décadas los pueblos indígenas hemos advertido que los cambios climáticos confirman el quiebre de la relación armónica entre los hombres y la Madre Tierra, poniendo en peligro el futuro de la humanidad Es todo un modelo de civilización el que está en crisis, aquel que se inició hace 500 años con el saqueo de los bienes naturales para el enriquecimiento y la acumulación de capital. La alternativa es cambiar el sistema, no el clima, apostando por un nuevo paradigma civilizatorio, por el Buen Vivir, en armonía entre los pueblos y la Madre Naturaleza.
Nuestras propuestas
Marco general:
• Reconocer y respetar la libre determinación de los pueblos indígenas, particularmente nuestros derechos a los territorios y bienes naturales, de conformidad con la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas de la ONU.
• Asegurar y garantizar la participación plena y efectiva de los pueblos indígenas en todos los niveles, respetando los procesos basados en la consulta y el consentimiento previo, libre e informado, de conformidad con la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas de la ONU.
• Reconocer, respetar y fortalecer la contribución fundamental de los conocimientos, innovaciones y prácticas tradicionales de los pueblos indígenas.
• Revisar las concepciones de desarrollo basadas en la acumulación de riquezas que acentúan la explotación sin límite de los bienes naturales.
Visión compartida:
• Urgimos a los países desarrollados a alcanzar un marco de compromisos vinculantes con marcos concretos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) como seguimiento al Protocolo de Kioto que vence el año 2012.
• Planteamos una reducción de emisiones de por lo menos 45% bajo los niveles de 1990 para el 2020 y de por lo menos el 95% para el 2050.
• Eliminación gradual del desarrollo de combustibles fósiles, y una moratoria sobre la explotación de combustibles fósiles, en o cerca de nuestros territorios y tierras indígenas, respetando los derechos al desarrollo de los pueblos indígenas.
• La visión compartida para la acción de cooperación a largo plazo no debe reducirse a definir el límite en el incremento de la temperatura y la concentración de GEI en la atmósfera, sino que debe comprender de manera integral y equilibrada un conjunto de medidas financieras, tecnológicas, de adaptación, de desarrollo de capacidades, de patrones de producción, consumo y otras esenciales como el reconocimiento de los derechos de la Madre Tierra para restablecer la armonía con la naturaleza.
Transferencia de tecnología:
• El conocimiento es universal y por ningún motivo puede ser objeto de propiedad y utilización privativa, como tampoco sus aplicaciones en forma de tecnologías. Los países desarrollados deben compartir su tecnología con los países en desarrollo.
• La transferencia e instalación de tecnologías debe ser inmediata, oportuna, libre de costo alguno, en armonía con la Madre Tierra y sin condicionalidades, tanto de tecnología ya patentada como de información no divulgada.
• Establecer los lineamientos para crear un mecanismo multilateral y multidisciplinario para el control participativo, la gestión y la evaluación continua del intercambio de tecnologías. Estas tecnologías deben ser útiles, limpias y socialmente adecuadas.
• Establecer un fondo de financiamiento e inventario de tecnologías apropiadas y liberadas de derechos de propiedad intelectual, en particular de patentes que deben pasar de monopolios privados a ser de dominio público, de libre accesibilidad y bajo costo.
Adaptación y mitigación:
• Garantizar el respeto, la protección y el fomento de los conocimientos tradicionales y los modos de vida sostenibles de los pueblos indígenas. Incluir salvaguardas ambientales y sociales de los pueblos indígenas, incluyendo aspectos culturales y espirituales.
• Políticas y fondos públicos que prioricen el reconocimiento territorial integral de los pueblos indígenas. Reconocer y promover los sistemas propios de los pueblos indígenas en el uso, manejo y conservación de los bienes naturales.
• El sistema de monitoreo, reporte y verificación no debe limitarse a medir los cambios en la cobertura boscosa sino incorporar variables sociales, en particular la relativas al cumplimiento de los derechos indígenas.
• Toda evaluación, recuperación y desarrollo de acciones de mitigación y adaptación debe incorporar los conocimientos y tecnologías de los pueblos indígenas, sujeto a su consentimiento previo, libre e informado y a la vez garantizar la participación de expertos indígenas.
• Demandamos que el Foro Permanente de Asuntos Indígenas de la ONU recomiende a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas que el Relator Especial sobre los derechos humanos y las libertades fundamentales de los pueblos indígenas elabore un informe sobre los impactos del Cambio Climático en los Pueblos Indígenas.
• Los Estados deben asegurar que los pueblos indígenas tengan el derecho de movilidad y no sean forzados a reubicaciones lejos de sus territorios y tierras tradicionales, y que los derechos de los pueblos en aislamiento voluntario se respeten.
• En el caso de migrantes por cambio climático, los programas y las medidas adecuadas deberán ser acordes con sus derechos, estatus, condiciones y vulnerabilidades.
Financiamiento:
• Todo mecanismo de financiamiento para la mitigación y adaptación del cambio climático debe ser establecido bajo la Convención Marco de Naciones Unidas para Cambio Climático y deben proporcionarse recursos directos para los pueblos indígenas.
• Establecer mecanismos participativos para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas en todos los procedimientos y operaciones de financiamiento. Los recursos deben proceder de fuentes públicas y ser adicionales a los fondos de ayuda al desarrollo.
• Establecer un fondo especial que permita a los pueblos indígenas y comunidades locales desarrollar sus propias actividades y contribuciones para remediar el cambio climático.
• Los países desarrollados deben comprometer un financiamiento anual nuevo de al menos 6% de su producto bruto interno para enfrentar el cambio climático en los países en desarrollo.
• El financiamiento debe ser directo, sin condicionamiento y no vulnerar la soberanía, ni la libre determinación de las pueblos indígenas.
• Las instituciones financieras internacionales, como el Banco Mundial, deben quedar fuera de la administración de los fondos creados y a crearse, porque financian proyectos que contribuyen al calentamiento global y con mayor razón ahora que el Banco Mundial pretende eliminar las salvaguardas para pueblos indígenas a través del “Programa por Resultados” – P4R.
• Los países desarrollados, principales causantes del cambio climático, asumiendo su responsabilidad histórica y actual, deben reconocer y honrar su deuda climática en todas sus dimensiones, como base para una solución justa, efectiva y científica al cambio climático.
• En el marco de la deuda climática, exigimos a los países desarrollados que restablezcan a los países en desarrollo el espacio atmosférico que está ocupado por sus emisiones de GEI.
Mercados de carbono y mecanismos conexos
• El FIPICC reitera que la mayoría de los bosques del mundo se encuentran en las tierras y los territorios de los Pueblos Indígenas. El FIPICC rechaza el comercio de carbón y las compensaciones de carbón forestal que modifica, privatiza y comercializa los bosques. Estamos profundamente preocupados que REDD+ ponga en peligro el futuro de la humanidad al reforzar el uso de combustibles fósiles, que es la causa principal de la crisis climática. Asimismo REDD+ amenaza la supervivencia de los Pueblos Indígenas y puede resultar un el despojo de tierra más grande de todo el tiempo. Los Acuerdos de Cancún no proporcionaron salvaguardas jurídicamente vinculantes sobre los derechos de los Pueblos Indígenas y proyectos tipo-REDD+ ya están resultando en violaciones de los derechos de los Pueblos Indígenas. REDD+ promueve las plantaciones industriales y puede incluir la siembra de árboles transgénicos. Además la inclusión de suelos y prácticas agrícolas en REDD+ y otros esquemas de los mercados de carbono podrían comodificar casi toda la superficie de la Madre Tierra. Asimismo también rechazamos el uso de las algas de los mares para proyectos de REDD+. Los bosques están conservados y manejados lo más exitosamente con la gobernabilidad indígena de los bosques y el reconocimiento, la demarcación y la titulación de las tierras y territorios colectivos de los Pueblos Indígenas.
Fuente: Bolpress
* http://www.secom.gov.br/sobre-a-secom/nucleo-de-comunicacao-publica/copy_of_em-questao-1/em-questao-do-dia/edicoes-anteriores/dezembro-2011/boletim-1425-07.11/desmatamento-na-amazonia-cai-11-7-e-pais-cumpre-a-reducao-assumida-em-copenhagen?utm_campaign=Newsletteremquestao&utm_medium=Meio.Ambiente&utm_source=Desmatamento.Amazonia&utm_content=71211
**http://www.biodiversidadla.org/Principal/Contenido/Documentos/Declaracion_de_los_Pueblos_Indigenas_del_Mundo_ante_la_COP17
(Información recibida de la Red Mundial de Comunidades Eclesiales de Base)