«no tengo más enemigos que los que se oponen a la pública felicidad» El Karai Guazú José G. Artigas Montevideo, 6 de mayo de 2010 ?
Este artículo de el Grito Argentino, nos señala una situación que es posiblemente la de muchos países en Latinoamérica, el estado abandonico, esta ausente para defender al pueblo más pobre, para cubrir la necesidad de los más pequeños y desprotegidos y así se configuran situaciones terribles, desde la matanza de 100 trabajadores rurales por los problemas con la tierra en Brasil y el estado que es abandonico para los pobres, protege los interese del poder y de los ricos, a este caso que se ha permitido el empobrecimiento creciente del pueblo Argentino??
El problema aquí esta en que es más importante si las personas o los números, si las cuentas y los equilibrios macroeconómicos o la necesidad de la gente, para que esta el Estado, para que sirven los políticos, esa es una pregunta que como un examen, los pueblos debería hacer a los precandidatos, antes de permitirles ser candidatos, porque llegan al poder y los domestican rápido y fácil y se olvidan de las villas y del Amazonia??
El rol del Estado es LA P?BLICA FELICIDAD?? este pensamiento acuñado en el seno del Antigüismo, unido aquella frase, que trascendiendo la historia fue escrita en el reglamento de tierras del año XIII, de que los más infelices sean los más privilegiados, tiene sin lugar a dudas las tres nobles vertientes que sustentaron las acciones de aquel formidable libertador, una es la herencia indoamericana, la otra es la vertiente comunitarista española y la otra será el Franciscanismo??que inspirará su impronta sobre toda la lucha por la independencia, que aún hoy estamos tratando de lograr??
Es que a los estadistas latinoamericanos, incluso a alguno de signo progresista, la amnesia súbita les hizo olvidar que el pueblo lo había puesto allí, para que lo protegiera no para que lo abandonara y en resumen traicionara.-
Es bueno que los pueblos vayan tomando conciencia que toda acción del Estado, que cause la publica infelicidad y especialmente entre los más pobres y desposeídos, los más infelices al decir de Artigas, es contraria a su naturaleza inherente y por lo tanto no justifica su existencia??
Un estado que no coadyuva con el pueblo, que se limite a proteger los intereses de unos pocos, esta traicionando su carácter democrática y el pueblo, si quiere ser libre y aspira a la publica felicidad, deberá demandar de ese Estado, el cumplimiento de sus obligaciones??Debido a que en muchos casos, los partidos y los dirigentes asociados al poder, hacen oídos sordos de la necesidades que su pueblo les reclama, parece que en buena parte de Latinoamérica, se hace necesario la organización de una articulación política, clasista??que represente los intereses de los desposeídos y los últimos de la sociedad.-
(Información recibida de la Red MUndial de Comunidades Eclesiales de Base)