Desmanes clericales (II) -- Jesús Mª Urío Ruiz de Vergara

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Enviado a la página web de Redes Cristianas

Zornoza22º) Desmanes irregulares (inaceptables)
Ahora me refiero a esos otros desmanes que sí tienen contenido jurídico, e, incluso, penal; o, por lo menos, contencioso. Me pronunciaré sobre tres, que llaman la atención por lo que indican de sensibilidad antigua, desfasada y equivocada de algunos eclesiásticos y de su ubicación en el mundo de hoy.

A) El caso del prior del Valle de los caídos. El año 2016 el juzgado de San Lorenzo del Escorial sentenció que fueran exhumados los restos de los cuerpos de los hermanos Lapeña, fusilados durante la guerra civil. El prior circunstancial del monasterio benedictino ubicado dentro del recinto del monumento conocido como Valle de los Caídos, Santiago Cantera, ha ido poniendo todos los obstáculos posibles al cumplimiento de la sentencia, hasta que los abogados de la familia consiguieron que el Senado formara una comisión para revisar el cumplimiento de la ley de Memoria Histórica en ese lugar tan emblemático, para lo que citó al prior para que el día 26 de marzo se personara ante la comisión senatorial. El prior se negó a comparecer en los términos propuestos por los senadores, e indicó que sería mejor que éstos fueran hasta el Valle. El motivo que adujo fue el compromiso con sus «sus ocupaciones en el monasterio, … y su condición de religioso».

Solo cabe calificar de esperpéntica tan excéntrica y delirante excusa. Y a mí, personalmente, admirador y apreciador del estilo y el saber estar de los miembros de la orden benedictina, me entristece y hiere esta salida de tono de un ciudadano español, religioso, además, ciertamente acostumbrado al voto de obediencia, al que se supone cabal y equilibrado, en una especie de vuelta a lo más reaccionario y bochornoso de un mundo medieval, lleno de privilegios, y responsable de una sociedad desajustada y asimétrica. Es intolerable que algunos eclesiásticos se consideren por encima del común de los mortales, y, en vez de servidores, como pedía el Señor Jesús, nos convirtamos en servidos, protegidos, e intocables. Menos mal que esta vez sí ha actuado el presidente de la Conferencia Episcopal, don Ricardo Blázquez, haciendo ver al monje benedictino la sin razón de su postura, e incitándolo a cumplir su obligación de ciudadano. Hay que reconocer, sin embargo, que un alto representante de la comunidad eclesial ha desaprovechado un magnífica ocasión para seguir el ejemplo del papa Francisco, y actuar con sencillez, sin complejos, y oliendo más a oveja que a empresario ganadero.

B) El caso doloroso del obispo de Almería.

El curso 2001.2002 la profesora de Religión, Resurrección Galera, fue despedida por casarse con un hombre divorciado. Desde entonces, E obispo, D. Adolfo González Montes, ha desoído las todas sentencias sucesivas de los diversos niveles jurídicos que han intervenido, hasta llegar a la última instancia del Tribunal Supremo, (TS).que declaró nulo el no llamamiento de la profesora para el curso escolar 2012-2013, al entender que se produjeron dos elementos negativos en esa decisión: una violación de los derechos fundamentales de una trabajadora, y, además, el indicio de una acción en represalia a un pleito emprendido por la docente hace 15 años. Por lo que, al margen de la readmisión, ordenó que se le pagasen los salarios de tramitación desde entonces.

Todo esto ya resulta penoso y preocupante. Pero todavía me produce más incomodidad y desasosiego los argumentos esgrimidos por el prelado de Almería: ha declarado que «hay sentencias que son imposibles de acatar» apelando al derecho a la libertad religiosa que garantiza la Constitución Española como «fundamental», para después afirmar tajante que «nadie me puede obligar a otorgar la venia religiosa para enseñar Religión» a Resurrección Galera, docente despedida en el curso 2001-2002 tras contraer matrimonio civil con un hombre divorciado».

Ha asegurado, también, que, en este caso, «estamos ante la colisión de dos derechos, el laboral, que debe ser respetado, y el derecho a la libertad religiosa». «Los tribunales deben ver cómo se resuelve», ha solicitado, para, a continuación, señalar que la postura de la Iglesia es que debe «ampararse el derecho a la libertad religiosa». «¿Cómo se salvaguarda si usted me obliga a tomar esta decisión contraria a la libertad religiosa?», se ha preguntado el obispo, quien ha reiterado que «a mí nadie me puede obligar a que yo le otorgue una venia religiosa para enseñar Religión a esta señora o a cualquier otra persona». «Es una violación de los derechos fundamentales», ha concluido.

Tal vez el señor obispo esté cayendo en el mismo fallo que él pretende señalar en no se sabe quien que pretenda obligarlo a respetar el derecho fundamental a la libertad religiosa. Este derecho es reconocido por una legislación civil, y no puede entrar en el mundo de la fe. Una persona casada con un divorciado puede ser una magnífica profesora de Religión, y, en lo profundo de su conciencia, también ser una seguidora fiel del Señor Jesús, y de sus valores evangélicos, aunque no cumpla tajante ni escrupulosamente ciertos mandamientos o prácticas católicas. El obispo de Almería haría bien en preguntarse si no es tal vez él quien coarta la libertad religiosa de la señora Inmaculada Galera. (Nota: de cualquier modo parece que uno de estos días va a recibir sus atrasados, y, en el momento adecuado, será repuesta en su puesto docente).

C) El caso del obispo de Cádiz

· A todas las noticias que nos llegan de la diócesis de Cádiz sobre el malestar de sus curas, quienes han escrito incluso una carta al Papa solicitando un aviso, o una corrección fraterna al obispo Rafael Zornoza, se ha unido otra que produce malestar y desazón: la denuncia de grupos cristianos de que has sido despedidos cinco trabajadores remunerados de Caritas, sin respetar los derecho laborales, y con modos y maneras más propias de una empresa ávida de ganancias.

El Grupo de Cristianos Populares denuncia la catarata de despidos de trabajadores de parroquias, colegios o instituciones católicas de la diócesis, como la destitución fulminante de la Directora del Instituto Superior de Ciencias Religiosas de Cádiz, Mª del Carmen Fernández, sustituyéndola por el sacerdote Jesús Zúrita, un sacerdote que viene de Madrid. Esta práctica es muy habitual den el obispo de Cádiz, que trae presbíteros de fuera de su cuerda y línea.

Yo pienso que la Conferencia Episcopal Española (CEE) podría, o tal vez debería, controlar y coordinar ese movimiento descontrolado de clérigos, que, muchas veces, significa un desmantelamiento de la diócesis de procedencia, y un asalto a la diócesis de destino. También es censurado Zornoza porque según ciertos grupos de cristianos comprometidos, este la ha liado separando de la gestión de algunos centros a distintas comunidades de religiosas en Cádiz, Puerto Real y La Línea de la Concepción?? «para ponerlos en manos de Educatio Servanda, una Institución que nuestro obispo muy bien conoce desde que estaba en Getafe, de la que es patrono, de orientación conservadora como los Kikos y el Opus y que es la que controla la Fundación que ahora se encarga de la gestión inmobiliaria de los pisos del obispado·.

D) El caso tristísimo del obispo de Alcalá de Henares.

· El caso de las declaraciones frecuentemente aberrantes del obispo de Alcalá de Henares. He aquí una afirmación de su última carta pastoral: «Reig Pla acusa al Estado de promover una «apartheid» contra la tradición cristiana». Y una síntesis de su diatriba contra los males de la cultura actual, más que tolerada, promovida por el Estado: «Injusticia social (con la síntesis del marxismo y el liberalismo), ecología idolátrica y fragmentada, anticoncepción, esterilización, aborto, ‘amor romántico’, divorcio, ‘amor libre’, técnicas de reproducción asistida, ?pornificación’ de las relaciones personales y de la cultura, sexualidad sin verdad, usurpación deliberada de la filiación natural de los niños, manipulación arbitraria de la anatomía, de la fisiología y de la identidad personal, eutanasia y suicidio asistido, ‘poliamor’, realidad virtual sustitutiva, manipulación y mejoramiento genético de embriones, bio-neuro-ingeniería posthumanista, etc. son sólo una parte de los escalones, programados, científica y sistemáticamente, en orden a la deconstrucción de la ‘identidad-misión’, querida por Dios para el ser humano».

¿Hace falta algo más delirante?