COMUNIDADES CRISTIANAS POPULARES DE ANDALUCÍA
Ante los atentados de Barcelona
Con inmensa consternación y con profunda tristeza, las Comunidades Cristianas Populares de Andalucía nos unimos al río de solidaridad que invade tantas personas, tantos colectivos, tantos pueblos y tantos gobiernos en repulsa absoluta contra los atentados ocurridos en Barcelona.
Esa solidaridad y la encomiable firmeza del pueblo de Barcelona para mantener su talante democrático y su defensa de los derechos humanos son la mayor garantía de futuro. Allí están ellos y allí estamos también nosotros.
Nadie tiene derecho a arrebatar la vida a otra persona y junto a otros colectivos rechazamos cualquier tipo de fundamentalismos y actitudes de islamofobia. Como bien expresa la APDHA: «Ciertas políticas y estrategias de nuestros gobernantes, como la venta internacional de armas o el apoyo a ciertos gobiernos, no aportan nada a la solución y refuerzan la situación en la que nos encontramos». «Unas políticas basadas en «la fortificación y securitización de fronteras», unidas a la «restricción de derechos» de las personas migrantes y refugiadas, no generan «seguridad y, mucho menos, justicia». Al contrario, observan cómo el discurso de odio y culpabilización «nuevamente se dirige a personas que nada tienen que ver con el terrorismo y que, precisamente, reclaman protección huyendo de estas mismas amenazas en sus países de origen». El rechazo a las personas musulmanas es «un caldo de cultivo que alimenta la violencia, castiga a inocentes y aleja a la sociedad de la convivencia real que existe en los espacios interculturales».
Desde nuestra pequeñez y desde un ámbito estrictamente religioso, nos atrevemos a lanzar aquí una llamada a todas las religiones y a todas las confesiones religiosas. Ha llegado el momento de pasar definitivamente aquella página de la historia, con guerras y conflictos entre religiones. Por desgracia, sólo consiguieron más odio y más dolor a miles y hasta millones de personas.
El salto cualitativo que les pedimos es que consigan formular un comunicado conjunto de rechazo a todos las formas de violencia contra las personas, dejando muy claro que «Dios» (con este u otro nombre o imagen: Conciencia universal, Vida, Plenitud, etc) no puede ser de ninguna manera compatible con ese comportamiento.
Ese comunicado significaría un salto sustancial para la realización de los derechos humanos:
Artículo 1:
«Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.»
Comunidades Cristianas Populares de Andalucía.
19 de Agosto de 2017..