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La lucha del líder revolucionario de América latina Túpac Katari, que fue descuartizado el 15 de noviembre de 1781 por encabezar rebeliones contra el invasor español hoy es motivo de estudio en Universidades, organizaciones políticas y sociales de nuestra América y de otros continentes, pero sin duda y hoy más que nunca por la derecha latinoamericana.
Katari buscaba la liberación de los indígenas frente al yugo impuesto por las fuerzas invasoras coloniales españolas.
Túpac Katari lideró un ejército de más de 40.000 hombres, enfrentó a los ejércitos españoles y a ejércitos organizados por los españoles habiendo logrado grandes victorias contra el yugo español, mantuvo sitiada la ciudad de La Paz durante tres meses, su espíritu humano evitó una masacre y solo pidió la salida de los españoles y de sus lacayos.
Los españoles usaron a algunos dirigentes aymaras y ?mistis?? o mestizos, personajes tristemente cobardes sin principios ni conciencia libertaria y renegados de su identidad ancestral que solo buscaban placer, robar y el dinero la corona española, primero para traicionar y entregar a Bartolina Sisa y luego para traicionar y entregar a Tupak Katari.
Los españoles lo juzgaron y condenaron a morir descuartizado por caballos que tiraban en direcciones opuestas, la misma suerte corrieron sus inmediatos seguidores y muchos otros hombres y mujeres fueron cruelmente victimados.
Ese genocidio cometido por los invasores españoles fue para evitar que surjan más hombres y mujeres rebeldes, para luchar en contra de la esclavitud, la usurpación de sus tierras, del abuso y sometimiento al que eran víctimas, ya que las batallas en las que el ejército rebelde de aymaras y quechuas luchaban y enfrentaban a los españoles se difundía en todo el continente, desde el centro del Tawantinsuyo hacia los cuatro puntos cardinales hasta las costas de la América donde arribaban los embarcaciones de españoles y portugueses es decir a todos los pueblos y culturas originarias de Latinoamérica y el Caribe quienes tomaban conocimiento de dichas batallas.
Katari luego de ser capturado y torturado, el 15 de noviembre de 1781 fue asesinado, pero antes de morir nos deja su legado que hoy se va cumpliendo en toda Latinoamérica y el Caribe:
«Nayjaj sapjarukiw jiwyapxittaxa nayxarusti, waranqa, waranqanakaw kutt’anipxani…»
«A mí solo me están matando, pero VOLVER? Y SER? MILLONES……»
Han pasado más de 200 años de ese hecho histórico, en nuestra historia hombres y mujeres han emulado esas batallas libertarias en contra del imperialismo colonialista que solo trajo luto y dolor a las familias de nuestro continente pero también han pasado hombres y mujeres que dieron sus vidas por la independencia y liberación de nuestros pueblos que fueron y siguen siendo motivo de estudio y análisis por instituciones educativas y de formación profesional.
Solo para mencionar a algunos líderes que han dejado legados imborrables y ejemplo de luchadores sociales y revolucionarios por nuestra independencia, libertad, justicia social, dignidad y por tierra y territorio como Tupak Katari, Bartolina Sisa, están: Simón Bolivar, Juana Azurduy de Padilla, Farabundo Martí , Emiliano Zapata, Augusto Cesar Sandíno, Carlos Fonseca, José Martí , Eva Perón, Ernesto Ché Guevara, Pancho Villa, Cacique Diriangén, Salvador Allende, Hugo Chavez y otros entre Jóvenes, Obreros y Campesinos, que son el alma y nervio, protagonistas de nuestra historia
Hoy esos hombres y mujeres que son parte de nuestra historia, anticolonial independentista y que en nuestra historia contemporánea fueron revolucionarios socialistas muchos de ellos caídos en batallas y guerras contra el imperialismo colonialista y otros asesinados por los esbirros del imperialismo capitalista, hoy pareciera que nuevamente son motivo de profundo análisis y estudio por el imperialismo estadounidense y sus aliados europeos mediante instituciones y organizaciones conservadoras no gubernamentales, por medios de comunicación al servicio del capitalismo neoliberal y por partidos políticos de centro y extrema derecha de América y Europa que pretenden neutralizar el nuevo proceso de cambio que vive Latinoamérica y el Caribe.
Estudios que más allá de lo ideológico aparentemente, pretenden encontrar puntos de coincidencia en el accionar, formas de gobernar, capacidad de convocatoria, estrategias de lucha y otras, entre los anteriores y actuales líderes, priorizando en las debilidades y errores de liderazgo, de gestión administrativa y de los errores de sus inmediatos colaboradores como métodos para neutralizar y derrocar a sus actuales líderes que mediante revoluciones democráticas y culturales (Elecciones electorales y masiva participación ciudadana), hoy encabezan esas transformaciones en beneficio de sus pueblos y de las grandes mayorías sociales de Latinoamérica y el Caribe.
Así nos lo demuestran los acontecimientos ocurridos en los diez últimos años, que luego de varias luchas sociales y pérdida de vidas humanas algunos países de Latinoamérica viven transformaciones sociales y económicas hacia una sociedad con equidad, dignidad y justicia social, con independencia total del imperialismo colonial y capitalista.