Carta al arzobispo de Oviedo -- Comunidades de cristianos de base de Gijón

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Sr. Arzobispo de la Diócesis de Oviedo
Gijón, 22 de mayo – 2012
El XXIV ENCUENTRO DE CRISTIAN@S DE BASE DE ASTURIAS no se pudo celebrar, como estaba previsto y como solía ocurrir con los Encuentros de años anteriores, en la Casa de la Iglesia de Gijón, debido a la prohibición que Vd. emitió y que nos fue comunicada a través del Vicario de Gijón-Oriente, Adolfo Mariño
Gutiérrez.

Como motivación de esa medida se adujo que el tema elegido para las conferencias de este año era inadecuado y que los conferenciantes eran hostiles a la Iglesia.
En primer lugar, nos sorprende mucho el primer motivo aducido: tema inadecuado. Desde el mes de marzo, más de 500 cristianos fueron asesinados en Nigeria, en atentados y ataques realizados por fundamentalistas islámicos.

En Egipto, desde hace un año, han tenido lugar varias oleadas de violencia en la que perdieron la vida varias decenas de
cristianos coptos y hubo centenares de heridos a manos de radicales musulmanes. También en Siria, durante los últimos meses, numerosos cristianos maronitas han sido víctimas del odio racial y religioso que impera en ese y otros muchos países contra las minorías étnico-religiosas. Los cristianos de la India sufren frecuentes ataques por
parte de grupos fundamentalista hindúes.

En los últimos meses se han producido además sucesos condenables de
fundamentalismo cristiano, como la quema de ejemplares del Corán, que son consecuencia y a la vez incentivo del fundamentalismo anticristiano. Tampoco faltan ejemplos de violencia e intolerancia entre grupos religiosos no cristianos, en los que se ven implicados, como víctimas y/o agresores, musulmanes, judíos, hinduistas, budistas, sijs?? sin olvidar los sangrientos conflictos internos del Islam entre suníes y chiíes y los conflictos entre distintos
grupos cristianos como los que a veces ocurren en Irlanda del Norte.

En esta realidad de intolerancia fundamentalista, que nunca dejó de existir pero que se ha agravado en los últimos años, se pueden encuadrar los famosos atentados del 11 de Septiembre de 2001 en EE.UU., 11 de Marzo de 2004 en Madrid, 7 de Junio de 2005 en
Londres, 23 de Julio de 2011 en Noruega?? 23 países con mayoría islámica persiguen a los cristianos.

La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) al tratar sobre la persecución contra los cristianos en el mundo habla de un mártir cada cinco minutos. El Papa se ha referido repetidas veces a esta realidad.
L?Osservatore Romano informa sobre este tema pormenorizadamente para concienciar al público sobre el problema.
Está, además el peligro del fundamentalismo social, entre grupos humanos con diferencias étnicas y culturales, que se ha agravado con el auge de la inmigración.

La interrelación de los diferentes grupos puede generar, rechazo,
xenofobia y violencia por parte de la población autóctona y también enfrentamientos entre los diversos grupos inmigrantes. Por último, está nuestro propio fundamentalismo cristiano, grupos integristas e intolerantes de carácter religioso en el seno de nuestra propia Iglesia, y eso tenemos que contemplarlo también pues si nos referimos sólo al que nos agrede y nos olvidamos del que nosotros ejercemos sería una postura hipócrita de ver sólo la paja en el ojo
ajeno.

El Congreso de Teología de Madrid del pasado año también abordó este tema. De hecho, los conferenciantes de nuestro ENCUENTRO DE CRISTIAN@S DE BASE DE ASTURIAS habían impartido la misma conferencia
en ese foro.
De todo lo indicado concluimos que el fundamentalismo es un tema muy de actualidad, a la vez que un problema muy grave y urgente. No comprendemos, pues, que ese obispado lo considere inapropiado para nuestras conferencias.

¿Con qué criterio de valoración se llegó a esa conclusión? y ¿en qué basa ese obispado ?que no fue elegido por los cristianos de la Diócesis? legitimidad para atribuirse la función de decidir qué temas podemos tratar, ejerciendo una censura similar a la del superado franquismo y que hoy no ejerce, por democrática, la autoridad laica, hasta el punto de negar el uso de la Casa de la Iglesia a quienes, por sentirnos Iglesia, la consideramos nuestra casa?

La otra razón aducida para la prohibición fue que los conferenciantes eran hostiles a la Iglesia. De esa acusación procede que se defiendan, en primer lugar, ellos mismos, pero también a nosotros nos toca algo, pues, si invitamos a nuestros actos a personas hostiles a la Iglesia, de alguna manera se podría considerar un acto de hostilidad el hecho mismo de la invitación. Y ahí es dónde debemos aclarar un malentendido. Es evidente que nuestros grupos de Cristianos de Base tienen discrepancias con la doctrina y la práctica de la Iglesia oficial, encarnada por la Jerarquía de la institución.

Le suponemos buen conocedor de la Teología de la Liberación y de las ideas de otras movimientos teológicos modernos que nos inspiran. Por lo tanto no vamos a tratar de lo que nos separa, que es bastante, ni
tampoco de lo que nos une, que no es poco. Simplemente queremos señalar que las discrepancias no significan hostilidad. Las discrepancias de la Jerarquia eclesial, de la que Vd. forma parte, con el mundo: otras iglesias y sectas cristianas, otras religiones, ateos?? son mayores que las que esa Jerarquía tiene con nosotros.

Si se interpreta toda discrepancia en clave de hostilidad se está declarando la guerra a la mayor parte de la humanidad.
El próximo año será el cincuentenario de la apertura de Concilio Vaticano II. Con mucho optimismo la Iglesia Católica enfatizó entonces su deseo de dialogar con el mundo. La involución que el Catolicismo sufrió desde entonces es enorme. La realidad es que hoy la Iglesia (su jerarquía) es incapaz de dialogar no ya con el mundo sino siquiera con sus propios grupos internos discrepantes, como nuestras Comunidades de Cristianos de Base: la prohibición de nuestro ENCUENTRO se hizo sin nigún tipo de diálogo, ni previo, ni posterior.

¿Hasta cuándo permanecerá nuestra Iglesia silenciada por una jerarquía autista que la rige autoritaria y antidemocráticamente
violando elementales derechos humanos?

Con la esperanza y el deseo de que nuestra Iglesia sea capaz de superar tal situación y sepa abrirse a los signos de los tiempos y el espíritu de Jesús, fraternalmente le saludamos desde las
COMUNIDADES DE CRISTIANOS DE BASE DE GIJ?N