Alandar
En Nicaragua la Iglesia católica sufre una persecución impensable hace unos pocos años. En el momento del triunfo sandinista un sector de la Iglesia ponía su esperanza en los gobernantes revolucionarios, en ocasiones con escasa crítica. Pero a partir de 2018, cuando el gobierno de Ortega sintió que perdía tanto el control como el respeto del pueblo nicaragüense, la represión del pensamiento crítico y de la libertad de expresión se generalizó. Ver noticia original en …