(dpto. prensa)
?Falleció otra compañera de lucha del Ycua Bolaños??
Lamentamos el fallecimiento de la querida compañera de lucha ?Asunción Benítez Vda. de Groselle?? (Viernes 19 de setiembre a las 6:00 horas de la mañana), quien perdiera aquel 1 de agosto de 2004 en el Ycua Bolaños a su hija de 14 años María Isabel; Y quien también perdiera a su esposo ?Don Ramón Groselle?? compañero en la ruta de la lucha, hace 20 días cuando no pudo soportar la $entencia del ?$obre$eimiento definitivo?? a los responsables de la muerte de su pequeña María Isabel, y de otros 400 muertos del Ycua.
Todas las familias que sufrimos desde aquel lúgubre 1A estamos nuevamente de luto con la perdida de nuestra querida Doña Asunción la que junto a su esposo Don Ramón supieron siempre darnos la palabra de aliento para luchar por la justicia, eran esa pareja serena y mesurada, esa pareja que siempre expresaba opiniones sabias que nos llenaban de paz a pesar de la adversidad.
Otra pareja mas que llega hasta el último suspiro de sus vidas clamando justicia por los que le han arrancado violentamente de sus vidas.
Don Ramón y Doña Asunción, vayan al encuentro eterno de su queridísima hija María Isabel, que nosotros tomaremos sus banderas y seguiremos esta cruzada hasta llegar a ese día donde una sentencia justa, lógica y con sentido común castigue las 400 muertes de nuestros seres queridos, y que nos de la definitiva paz que todos necesitamos.
Para su despedida se realizó un responso en la Iglesia de ?La Santísima Trinidad?? a las 15 horas del lluvioso sábado 20 de setiembre.
Doña Asunción había elaborado un ?testamento vital??, escribiendo una carta con el deseo de leerlo en vida ante todos los medios de comunicación (oral, escrito y televisivo, en conferencia de prensa), para luego solicitar -como ultimo deseo- difundirlo como su mensaje final a las Autoridades de todos los Poderes del Estado, a los Familiares y Victimas del Ycua Bolaños y a la Ciudadanía en general.
Pero fue sorprendida por la muerte antes, y no pudo realizar su deseo, que fue cumplido luego por su hijo Oscar Groselle, quien lo leyó en el responso de la Iglesia Santísima Trinidad, lugar donde ella siempre encontró paz y consuelo en los últimos tristes cuatro años y un mes de la masacre.
A pedido de sus familiares adjuntamos a continuación el contenido del mismo con el deseo de ser difundido.
Muchas Gracias..
CARTA DEL ULTIMO ADIOS
Hoy deseo dirigirme a los habitantes de nuestro querido Paraguay, en los últimos momentos que me quedan de vida, y desde la sinceridad de mi agonía iniciada aquel 1 de agosto del año 2004, cuando estallo en llamas el supermercado Ycua Bolaños que asesinó a mi hija María Isabel y a tantas otras personas igual de inocentes.
Hoy, un extraño resplandor de luz me ilumina para escribir estas líneas con mi pulso tembloroso, mi cuerpo algo inerte, mi voz casi apagada, plenamente consciente de la gravedad de mi pronto destino, consumida por una enfermedad y esencialmente por una tristeza terminal, que me obliga a compartir esto que considero mi testamento vital, dirigiéndome a todas las personas que valoran la vida y que hoy deseen escucharme.
Soy una víctima más del Ycua Bolaños, hace 4 años y un mes que perdí a mi hijita de 14 años María Isabel y desde entonces hasta hoy no he descansado, he acompañado junto con mi esposo la lucha reclamando Justicia por aquella masacre.
El mismo día que los jueces corruptos y cobardes – Arnaldo Martínez, Miriam Peña y Vicente Cárdenas – concedieron sobreseimiento definitivo a los Paiva, perdí también a mi esposo Ramón Groselle, a quien le paro el corazón al no soportar tanto dolor y humillación sufrido por esa sentencia injusta, ilógica y desposeída del mas mínimo sentido común al tratarse de los responsables de nada menos 400 muertes.
Al conceder impunidad a nuestros ?asesinos sueltos?? los Paiva, se esta vendiendo licencia para matar, se los libera para seguir actuando como monstruos con dinero, para adorar sus tesoros, para seguir lustrando con sangre hasta la última moneda, para pisotear lo más preciado ?LA VIDA?? y seguir matando de mil maneras como lo hizo hace unos días dejando morir a la hija de una humilde cajera de su Supermercado, a quien estafo con su seguro social IPS y ni fue capaz de ayudar mas que con algunas monedas y a quien con soberbia respondió que ?mientras tenga plata?? voy a hacer lo que se me antoje con la gente??.
Como puede haber jueces, abogados y hasta senadores que protejan a seudoempresarios con este tipo de valores, gente que pisotea las leyes, la dignidad y hasta la vida de las personas.
Ahora que me siento a pocas horas de mi muerte, Yo Asunción Benítez Vda. de Groselle, deseo gritar con las últimas fuerzas que me quedan ?ESTO NO ES JUSTO??.
Hay tantas lágrimas ya derramadas, es tan inmensa la indiferencia de nuestras autoridades, tantas injurias en el día a día, y tantas humillaciones a las víctimas y familiares.
Pero estoy segura que sus seres queridos alguna vez preguntaran a estos Juece$, ¿Por qué no valoraron las vidas en Ycua? ¿Por qué hicieron sufrir tanto a esa gente? ¿Qué peso mas que la vida de 400 personas?. Mas temprano que tarde esos insaciables bol$illos se vaciaran y esas escasas conciencias pesaran. Estamos seguros que el tiempo traerá la justicia que los hombres no quisieron encontrar a cambio de unas monedas.
En los últimos dolientes cuatro años de nuestras vidas, hemos andado tanto por nuestras calles, caminado tantos kilómetros bajo lluvia, sol o frió; sin cansancio ni sed, pero convencidos de que la verdad es una sola. Por ello, hoy día no puedo marcharme de esta vida sin antes gritar una vez más que !!las puertas se cerraron?? los Paiva lo ordenaron!!!!. Y seguiré gritando siempre!!!
Me reconforta saber que me esperan un Cielo y un Dios, y con ?l los más de 400 ángeles mártires del Ycua, y entre ellos encontrare sonrientes a mi hija y mi esposo, también victimas de la avaricia de un ser despiadado al que le importó más las mercaderías que la vida de las personas.
Sé que muy pronto mi rostro será una foto más prendida fuerte a la bandera que nos ha acompañado en nuestra lucha en estos años, esa bandera que ha sido llevada como la cruz que Cristo llevó hasta el calvario, esa bandera en la cual ha quedado impresa el rostro de todos los que hemos sufrido con impotencia la barbarie de un Poder Judicial corrupto, deshonroso y criminal, cómplice de todos los político$ de turno, juece$, abogado$, gestore$ y seudoempresaurio$ que se confabulan llenando sus bolsillos, aumentando sus riquezas, para seguir en el camino sucio, pisoteando la vida y la dignidad de las personas.
Desde mi lecho de muerte pido a la ciudanía que no olviden nunca nuestro dolor, y a todos los familiares y víctimas del YCUA BOLA?OS les ruego que sigan luchando por defender la vida.
No se cansen de seguir manteniendo viva nuestra memoria hasta que un día en Paraguay verdaderamente se realice un cambio total, y principalmente una renovación absoluta en el poder judicial, y que los actores del DERECHO trabajen con honestidad, coraje y compromiso con la verdad; Sólo con eso se podrá devolver la paz y el orgullo de sentirnos paraguayos y no como huérfanos marginados en su propio País.
Somos muchos los que hemos muerto sin ver cumplidas nuestras esperanzas aquí en la tierra, sabemos que nadie podrá devolvernos la vida, pero queremos seguir confiando en todos Ustedes, los que siguen viviendo y luchando para que haya Justicia y nunca más otro Ycua Bolaños.
Por ultimo, en mis postrimeros suspiros exclamo ?NO HAY PAZ SIN JUSTICIA??.
Asunción Benítez Vda. De Groselle C.I. 649.703 +
Difundido por pedido y autorización de su Hijo Oscar de Jesús Groselle Benítez C.I. 2.886.891
Muchas gracias a todos/todas.
CLARI BENITEZ YEGROS