SALUDO A «REDES CRISTIANAS». Proconcil

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Proconcil

En nombre de la fundación Proconcil, saludamos la constitución de la nueva plataforma de coordinación eclesial ?Redes Cristianas??, con nuestros mejores deseos a sus promotores y participantes, para que avancen en los objetivos que han manifestado en su ?Carta de Identidad??.
Apreciamos que el nombre ?Redes Cristianas?? sugiere una manera de organizarse basada, sobre todo, en la comunicación. Las redes sociales y eclesiales aportan espacios flexibles en donde pueden encontrarse y colaborar colectivos que cultivan su identidad y desarrollan sus actividades con un amplio margen de autonomía.
Reconocemos, pues, novedad en Redes Cristianas y, al mismo tiempo, inscripción y continuidad con una cultura eclesial de la que surge y que la antecede, que ha tenido variadas concreciones en las últimas décadas; la última, sin ir más lejos, la Corriente Somos Iglesia, que, entre 1996 y 2002, ejerció una función articuladora parecida a la que ahora se propone Redes Cristianas.
Deseamos de corazón que Redes Cristianas afirme la legitimidad de su opción eclesial y de su contribución a una Iglesia más encarnada y servidora, sin ser ciega a sus posibles limitaciones e insuficiencias, que, por otro lado, a nadie nos faltan.
Deseamos que se sientan Iglesia, que hagan sentirse Iglesia a muchas otras personas y que sean reconocidos y reconocidas como tal, aunque no se compartan necesariamente todos sus planteamientos como plataforma, o los de personas o grupos que forman parte de ella.
Deseamos, en definitiva que puedan encontrarse, humilde y misericordiosamente, con otros sectores de Iglesia para comprenderles y dejarse comprender por ellos y así poder colaborar en la permanente construcción de una Iglesia al servicio del Reino y de los pobres.
Aunque a menudo se olvide, la Iglesia necesita experiencias como Redes Cristianas. Aunque a menudo se olvide, esa necesidad es recíproca. Y a Dios nadie le sobra, aunque con frecuencia lo olvidemos.
Por eso, en este tiempo de Pentecostés le pedimos al Espíritu que derrame sus Dones sobre toda su Iglesia, especialmente, sobre el esfuerzo y compromiso de quienes la llenan de vida y dinamismo.
Emilia Robles y Javier Malagón
13 de junio de 2006