Desde hace seis años, el Centro de Investigación e Información en Consumo edita la revista Opcions, una herramienta con ideas útiles para practicar un consumo diario que respete el medio ambiente y los valores de justicia social.
¿Qué implicaciones tiene que yo compre una marca de leche y no otra? ¿Y una marca de detergente y no otra? ¿Y un tipo de coche y no otro? Un largo etcétera de productos de nuestra vida cotidiana hacen que a diario apoyemos a empresas, prácticas y situaciones determinadas. Para que seamos conscientes de ello y dispongamos de información y criterios éticos con los que elegir, tenemos la revista Opcions.
?En nuestras acciones cotidianas actuamos de acuerdo con nuestra ética y valoramos lo que nos parece bien o mal antes de tomar decisiones. En cambio, cuando consumimos es habitual elegir las opciones que se nos presentan como más fáciles, baratas, accesibles o de moda.??
?sta es la visión que, desde hace seis años, lleva al Centro de Investigación e Información en el Consumo (CRIC) a editar la revista Opcions, una publicación que apuesta por el consumo responsable y que ofrece recursos útiles para, en el día a día, saber responder a preguntas como por qué compro este producto, de qué está hecho y de dónde procede o a qué empresa estoy pagando al escoger determinada marca.
Se trata, explican desde el CRIC, de cambiar algunos hábitos y, sobre todo, de estar informados para realizar un consumo ?consciente??, que no atente contra los derechos humanos y que sea sostenible. Para ello, Opcions ofrece en cada nuevo número que publica ideas y herramientas para mejorar el consumo diario, da argumentos para entender cómo funciona el mercado a nivel local e internacional e indaga en determinadas marcas de productos para saber qué política llevan a cabo las empresas que los fabrican.
En el último número publicado por Opcions, por ejemplo, el CRIC centra su atención en el consumo consciente de libros y analiza cuestiones como la sostenibilidad ambiental, la propiedad de las editoriales, el copyleft y la licencia creative commons. En sus páginas también reflexiona sobre otros temas como la responsabilidad social corporativa en empresas como Repsol-YPF, la crisis energética y la llamada intercooperación, es decir, la cooperación entre dos o más entidades en el ámbito de la economía solidaria para beneficiarse mutuamente o impulsar un servicio conjunto.
En números anteriores, además, el Centro de Investigación e Información en el Consumo ha profundizado en las cooperativas de trabajo, ha abordado el tema de la globalización económica, ha sugerido el debate sobre la necesidad o no de contar con un sello ecológico y ha analizado todo lo que envuelve a productos concretos como los detergentes, los ordenadores, los muebles, los juguetes o la pasta de dientes.
Compartir vehículo, ahorrar energía en la climatización del hogar, realizar fiestas sostenibles, apostar por los plásticos compostables, tener un huerto en la terraza de casa y promover las máquinas de vending en los espacios de trabajo son algunas de las propuestas que el CRIC ha puesto sobre la mesa para un consumo responsable.
Limitaciones para elaborar la información
?No queremos hacer una revista de actualidad, sino aportar contenidos que se puedan usar y reestudiar en cualquier momento??, apuntan desde Opcions, que advierte que cuando desde la revista preguntan a las empresas por su política medioambiental o de responsabilidad social ?muchas veces no saben de qué hablamos??.
A esta limitación para elaborar la información se añaden otras como el ?gran desconocimiento?? por parte del mundo industrial del impacto ambiental de su actividad, las dificultades para seguir la pista de la fabricación de los productos en el marco de la globalización y el hecho de que ?no hay una legislación que obligue a las empresas a la transparencia ni que haga respetar el derecho de acceso a la información por parte de los ciudadanos??.