La credibilidad de la prensa -- Pedro Serrano

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Enviado a la página web de Redes Cristianas

En el comunicado contra Podemos, la APM, Asociación de la Prensa de Madrid, dice que considera incompatible con el sistema democrático que un partido político, sea el que sea, trate de orientar y controlar el trabajo de los periodistas y limitar su independencia. Totalmente de acuerdo. ¿Quién podría negar semejante evidencia? Por tanto, si se demuestra fehacientemente que Podemos ha incurrido en alguna de estas prácticas que reciba el reproche social y político e incluso el castigo legal que se merezca.

Ahora bien, dicho lo anterior, uno no puede dejar de hacerse algunas preguntas. ¿Por qué la APM ha tardado tanto en darse cuenta de la gravedad de estas prácticas existentes desde mucho antes de la existencia de Podemos? ¿Por qué la APM y buena parte del sector periodístico siguen callando o claudicando ante dinámicas represivas provenientes de diferentes poderes fácticos o políticos? ¿Por qué algunos periodistas de este país han soportando ruedas de prensa a través de un televisor o donde se prohibe hacer preguntas? ¿Por qué algunos periodistas son recriminados por sus jefes, cambiados de puesto o forzados a despedirse por hacer demasiado bien su trabajo? ¿Por qué creen ustedes que está aumentando la autocensura entre los profesionales del periodismo? ¿Por qué será que casi el 70% de los jóvenes no confían en los medios españoles, según el último informe de Reuters y de la Universidad de Oxford?

Sobra decir que hay excepciones honrosas, pero el verdadero problema de la prensa no reside en las presiones de políticos y de otros poderes en la sombra, sino en la claudicación de ésta ante las mismas. No son pocos a los que se les llena la boca de grandes palabras sobre la libertad de prensa y de expresión para luego, una vez pronunciadas, hacerles una sonora pedorreta. En este tiempo de simulación y artificio, ya no es primordial la búsqueda de la verdad. ¿Para qué esforzarse en encontrarla cuando se puede fabricar a la medida de nuestros intereses?

. Valladolid