Enviado a la página web de Redes Cristianas
(Para el periódico digital EL ESP??OL , 27-Mayo-2018))
1. Usted, junto con otros cinco claretianos progresistas, fue expulsado de la orden. Tuvo problemas con los sectores eclesiásticos más conservadores por su libro ‘Nueva ética sexual’, en la que se mostraba tolerante con el uso de anticonceptivos, por ejemplo. ¿Por qué la Iglesia no se moderniza? ¿Cuál es su experiencia a este respecto?
¿Por qué la Iglesia sigue siendo tan machista, como decía usted ayer? ¿Entiende que haya quejas como la de la Cofradía del Coño Insumiso?
La causa de la expulsión tuvo origen en mi libro ?Nueva Etica Sexual??, que publiqué hace 38 años, 15 después del concilio Vaticano II, pero con Juan Pablo II ya de Papa, artífice de la involución y que paralizó el espíritu y contenido del concilio.
Mi libro se teje entre la tensión de una liberación profundamente esperada y una moral meticulosamente represiva. En él replanteo el problema de sexualidad desde la persona. Durante siglos se consolidó el miedo, la vergüenza, la depreciación y represión de la sexualidad, que derivaba de la depreciación y represión de la persona. En mi libro sometía a revisión, temas vivos e importantes ( institución familiar, celibato, antifeminismo, control de natalidad, divorcio, aborto, relaciones prematrimoniles, homosexualidad, masturbación??) desde un nuevo paradigma antropológico, científico y bíblico-teológio.
Es este, ni más ni menos, el encuadre con que procedió el concilio Vaticano II: ?Los nuevos estudios y hallazgos de las ciencias , de la historia y de la filosofía suscitan nuevos problemas que reclaman nuevas investigaciones. Los teólogos están invitados a buscar siempre un modo apropiado de comunicar la doctrina a los hombres de su época ,?? ( Gaudium et Spes, 62) .
No es dextrañar, por tanto, que el libro fuera denunciado y el autor sometido a un proceso extraordinario que duró 10 años.
En el momento actual, y en un ámbito religioso católico fuertemente tradicional, han llenado la Iglesia denuncias y testimonios de muchos cristianos ?teólogos de la liberación sobre todo- , que han criticado el atraso, contradicciones y transgresiones de la Iglesia, con palabras seguramente menos malsonantes que las del actor Guillermo Toledo, pero con argumentos bien fundados, que determinaron censuras, marginaciones y sanciones.
En la iglesia primitiva pervive la conciencia de la igualdad del varón y la mujer , pero fue perdiendo fuerza poco a poco. Los cristianos no supìeron desentrañar toda la fuerza del principio igualitario del Evangelio y aceptaron modelos institucionales y de conducta de la cultura semita y grecorromana poseídas por el menosprecio de la vida corporal y sexual y la convicción de que la mujer era congénitamente más débil que el varon, más ignorante y más incapaz y, en consecuencia, destinada a estar sometida al varón y ser protegida por él. Estos modelos reafirmaron el carácter prevalentemente patriarcal y machista de la Iglesia, le hiciereon oponerse al movimiento feminista moderno e incluso impulsar y pseudojustificar situaciones claramente antifeministas.
2. Decía usted en la rueda de prensa de Willy Toledo que el comunismo y la izquierda tienen muchas cosas en común con la Iglesia, y que debían reconciliarse. ¿Por qué la Iglesia siempre ha estado asociada a la derecha y a los poderes económicos, que son los más conservadores? ¿Cómo podemos buscar esta reconciliación entre ‘comunismo’ e ‘Iglesia’?
El dinero, el poder y la dominación siempre estuvieron en la derecha, defensora de sus privilegios y monopolios y enemiga de la igualdad y de una justa y solidaria distribución de la riqueza.
Hay pobres porque hay empobrecedores y hay oprimidos porque hay opresores. Los pobres no son efecto de la casualidad o fatalidad. La parte más significativa y poderosa de la Iglesia, hizo frecuentemente alianza con quienes detentaban la riqueza y el poder. Y, lógicamente, chocaban con quienes luchaban por un cambio que eliminara la desigualdad e injusticia.
En la alianza de la Iglesia con la Política ?imperialista, conquistadora, colonizadora, globalizada hoy- se supo señalar muy hábilmente y calificar como enemigos de Dios y de la religión a quienes se proponían lograr una sociedad más igualitaria y justa. Los idólatras del poder y del dinero se presentaban como defensores de Dios . ¿De qué Dios? No ciertamente del Dios de Jesús, gran profeta, enviado para anunciar la Buena Noticia de la liberación de lo pobres y oprimidos: ?Ay de vosotros los ricos??No se puede servir a Dios y al dinero??.
La iglesia de Jesús tiene su lugar propio entre los pobres y debe hacer opción por aquellos movimientos , sistemas o políticas que mayormente aseguren la dignidad , los derechos y la liberación de los más pobres, porque son estos ( los que no tienen voz, los explotados y descartados) los que precisamente son preferidos por Dios.
En este sentido, la política verdadera ? también si es comunista- se mide por programas, acuerdos y leyes que garanticen una mayor igualdad, justicia, solidaridad, libertad y paz para todos.
3. Usted contó en la rueda de prensa de Willy Toledo que Jesucristo era un rebelde y que también se enfrentó a las convenciones religiosas de la época. ¿Hoy Jesucristo también sería acusado de delito de ofensa contra los sentimientos religiosos?
No lo dude, lo sería. Lo fue en su tiempo y en su religión judía: ?Es blasfemo, tiene dentro a Belcebu??, senteciaban los Sumos sacerdotes, escribas y fariseos.
Nuestra gente de hoy, mayoritariemante católica, practica una religiosidad sincera, -la que le han enseñado- pero se acabó el tiempo de la fe del carbonero, y necesita ser reajustada y enriquecida con una vuelta radical al Evangelio.
El ser critiano supone conocer a Jesús en su modo de vivir, pensar, sentir y actuar: consigo, con los demás, con la naturaleza, con Dios. Es un estilo de vida, para las 24 horas del día.
Este retorno a Jesús, para conocerlo de verdad y seguirlo, es lo primordial. Y sin El, todo lo demás en el cristianismo, no se explica o no se sabe qué valor tiene.
Retornar a Jesús es primordial, pues entre El y nosotros se han interpuesto muchos muros y vallas ?doctrinas que poco o nada tienen que ver con El- que impiden pueda ser conocido y seguido.
4. Usted es religioso y a la vez, defiende la libertad de expresión de Willy Toledo. Hay quien se sorprende por esto. ¿Cómo creyendo en Dios y en la Virgen defiende que Willy diga que se caga en ellos? Explique su postura.
Cuando el Vaticano II dice que ?los cristianos tienen parte no pequeña dd responsabilidad en el origen del ateísmo, poque por su falta de educación en la fe, por su deficiente manera de explicar la doctrina, o por sus defectos de la vida moral y social han ocultado más que revelado el rostro auténtico de Dios y de la religión?? ( Gaudiun et Spes, 19), estoy convencido de que expresiones irreverentes como las de Guillermo Toledo no van contra el Dios auténtico ni contra María de Nazaret, la de verdad, sino contra un rostro de ellos desfigurado, envilecido y manipulado.
Yo también me aparto y reniego de esa clase de Dios y de esa figura de María. Querer cohonestar a Jesús y a su Madre María con el desspotismo político, con la soberbia e hipocresía de los grandes, con la opresión y desprecio de la dignidad humana , con el desprecio de los derechos de los más pobres, eso sí que mentira y se convierte en blasfemia.
5. ¿Puede el Papa Francisco ayudar a la modernización de la Iglesia y a aumentar su tolerancia con los tiempos modernos? ¿Qué cree que diría el Papa sobre el caso de Willy Toledo?
El Papa Francisco se mira en el espejo del Evangelio, fundamento y norma del obrar y pensar cristianos y desde él trata de llevar a cabo su misión en el mundo de hoy. Y acepta y reconoce como programa guia para nuestro tiempo el promulgado por el concilio Vaticano II.
Y es el primero que ha palpado la dificultad, la resistencia e incluso rebeldía de muchos dentro de la Iglesia (incluidos cardenales y obispos ) , que querrían seguir pegados al concilio de Trento.
Le ha caido encima una montaña de problemas, ya viejos, que se venían eludiendo y aplazando. Ha sabido ir a la raíz, con humildad, lucidez y coraje, y está marcando un sólido y esperanzador camino para recuperar la credibilidad de la Iglesia.
Yo creo que el Papa Francisco , tras escuchar atentamente a Willy Toledo, lo comprendería, acaso le recomendaría otro lenguaje menos inadecuado y provocativo y lo abrazaría.